“Esas no son cosas de querer o no querer de la ciudadanía”, manifestó el cardenal Rubén Salazar, arzobispo de Bogotá, a propósito de la propuesta de someter el tema del llamado matrimonio igualitario a un referendo.

“Son principios que se basan en la naturaleza misma del ser humano”, agregó el prelado católico.

EL NUEVO SIGLO: ¿Qué comentario le merece la audiencia sobre el matrimonio igualitario que hizo la Corte Constitucional?

RUBÉN SALAZAR:No es un tema fácil, porque indudablemente que tiene mucha implicaciones.

Nosotros como Iglesia hemos defendido y seguiremos defendiendo el Evangelio de la familia. Y el Evangelio de la familia significa que en el designio de Dios, el matrimonio, no es sino entre un varón y una mujer para que ellos puedan engendrar la vida y por lo tanto se pueda constituir una familia auténtica y puedan seguir adelante con la tarea de construir un mundo nuevo.

Equiparar a la unión del varón y la mujer a una unión entre dos hombres o entre dos mujeres, o entre lo que sea, es una equiparación que no es correcta. No es correcta bajo ningún punto de vista. Si ellos afirman que tienen derecho, yo creo que están equivocados. No tienen derecho, porque uno no tiene derecho sino a aquello que le corresponde. Y a ellos no les corresponde formar un matrimonio, no les corresponde formar una familia.

Esto no significa que los estemos discriminando. Ellos tienen muchas formas y ya la ley lo ha previsto y la ley lo afirma. Tienen muchas formas de convivir, de hacer que su convivencia tenga reconocimiento legal, de hacer que su convivencia tenga una serie de privilegios, pero que no equiparen eso al auténtico matrimonio entre varón y mujer.

ENS: ¿Qué consecuencias traería que se aceptara el matrimonio igualitario?

RS:Pues sencillamente se va como dañando el fundamento mismo de la sociedad, porque empieza a ponerse en el mismo nivel, por lo tanto empiezan a equipararse realidades que no son iguales.

Una sociedad no puede construirse sino sobre sus verdaderos fundamentos. No se pueden meter fundamentos que no son los auténticos.

Referendo

ENS: En esta misma audiencia la Procuraduría propuso un referendo para que la ciudadanía decida. ¿Qué opina?

RS:Esas no son cosas de querer o no querer de la ciudadanía. Son principios que se basan en la naturaleza misma del ser humano. El Señor creó al ser humano varón y mujer. Y por lo tanto, la unión de ese varón y de esa mujer es donde está la célula misma de la sociedad. Equiparar otras cosas a eso indudablemente que significa estar subvirtiendo el orden mismo de la sociedad. Y una sociedad verdaderamente bien constituida por más de que lo quiera no puede subvertirse a sí misma. No puede quitarse los fundamentos esenciales sobre los cuales tiene que construir.

ENS: ¿El matrimonio en Colombia está en crisis?

RS:No sé qué quieras decir con el matrimonio en crisis. Que haya parejas casadas que estén en crisis, indudablemente que las hay, porque no siempre la gente está a la altura de los compromisos que han adquirido en el momento del matrimonio. Pero el hecho de que haya parejas en crisis no quiere decir que el matrimonio como institución esté en crisis.

El matrimonio es una institución que como tal no podrá jamás entrar en crisis.

ENS: ¿Será que las personas se están casando ‘a la loca’?

RS:Ahí está el problema: que no hay preparación adecuada para el matrimonio, que no hay hoy en día la aceptación de unos principios fundamentales válidos para siempre y por lo tanto se está banalizando.

Familia

ENS: Se acerca el sínodo de la familia. ¿Qué tema van a llevar los obispos colombianos?

RS:Si Dios quiere yo asistiré a ese Sínodo en el mes de octubre. Allí vamos a discutir muchos aspectos de la vida familiar, pero pueden tener absoluta certeza de que lo que es el núcleo mismo fundamental del Evangelio, de la familia, de la doctrina de la familia, ese no se va a cambiar.

Seguramente se van a proponer acompañamientos pastorales, se van seguramente a proponer nuevas metodologías para la preparación de las parejas para el matrimonio, nuevos procedimientos para declarar la nulidad de un matrimonio, pero el núcleo esencial del Evangelio de la vida, del Evangelio de la familia, ese no se va cambiar. Y no se puede cambiar porque está inscrito en la naturaleza misma  del ser humano.

ENS: ¿Qué piensa de la adopción de niños por parejas del mismo sexo?

RS:Ese es otro caso típico de cómo se empiezan a subvertir las cosas. Un niño tiene derecho a tener papá y mamá. Con una adopción por parte de una pareja gay, se le estar privando de un derecho que tiene el niño.

Aquí en la discusión que se ha hecho en Colombia se ha planteado la cosa como si fuera el derecho de los adoptantes. No, el derecho de los adoptantes no existe. Existen los derechos del niño a ser adoptado. Él tiene derecho a crecer con toda la riqueza que da la presencia de la paternidad, la presencia de la maternidad al interior de la familia. Él tiene derecho a vivir toda la riqueza de la masculinidad y de la feminidad. Y por lo tanto se le esta violando un derecho cuando se le priva de algunos de esos aspectos fundamentales.

ENS: Hace pocos días el Partido de La U presentó un proyecto para reglamentar la eutanasia. ¿Qué opina? 

RS:Ese es otro problema. Aquí se habla de muerte digna y eso es sencillamente un eufemismo para indicar que se esta procediendo contra la vida. Uno muere dignamente cuando sabe morir, cuando sabe aceptar sus limitaciones, cuando sabe aceptar su dolor, cuando sabe aceptar sus sufrimientos, cuando sabe aceptar la muerte. Eso es morir dignamente. Y morir dignamente no es suicidarse.

Elecciones

ENS: ¿Qué esperan ustedes de las elecciones del octubre?

RS:Que sean elecciones limpias, sanas, que no haya corrupción, que no haya engaño, que no haya mentira. Que los candidatos sean verdaderamente hombres honestos que busquen el bien del país, el bien de la región, el bien del municipio y no gente que vaya detrás de intereses oscuros.