85 homicidios se registraron en septiembre frente a 144 del año pasado, lo que implica una caída del 41 por ciento, anunció ayer el alcalde mayor Gustavo Petro.
“La tesis de que esta baja de homicidios es una tendencia nacional no es cierta, esto se debe a la estrategia de la Policía y a políticas como el desarme”, precisó el burgomaestre, para quien la estadística se debe a que el asesinato con arma de fuego y en vía pública se redujo.
En septiembre no se registraron homicidios en las localidades de Teusaquillo, Antonio Nariño y Candelaria.
Petro comparó la cifra bogotana con las de otras capitales, expresando que en Cali el homicidio bajó 7 por ciento y en Pereira bajó 25 por ciento, mientras que subió en Medellín 15 por ciento, en Barranquilla 12 por ciento, en Cartagena 14 por ciento y en Bucaramanga 100 por ciento.
Entre enero y septiembre de 2012, la tasa consolidada de homicidios va en 16,02 por cada cien mil habitantes frente a 22,1 de 2011. Sin embargo, Petro manifestó que la meta es llegar a un dígito.
Junto a Petro se encontraba el comandante de la Policía Metropolitana, general Luis Eduardo Martínez, quien informó existencia de un plan pistola, ofreciendo 20 millones de pesos por cada policía muerto, a causa de los operativos que se adelantan en la Capital contra las mafias que operan en sitios como la zona del Bronx.
El secretario de Gobierno, Guillermo Asprilla, quien acompañaba a Petro y Martínez, indicó que el toque de queda de menores, que se aplicó recientemente, se hará nuevamente en las fechas en las que el Distrito lo considere conveniente y no descartó su implementación durante el Halloween.
¿Y el Metro?
El alcalde Petro anunció que aún no ha recibido por parte del Banco Mundial el concepto de los estudios de diseño de la primera línea del Metro pesado para la capital.
“El Banco Mundial no ha dado todavía su concepto alrededor de la negociación entre el Distrito y el consorcio español Euroestudios-Idom-Cano Jiménez, el cual fue seleccionado en proceso adelantado por la Administración pasada”.
El mandatario recordó que “el ente multilateral analiza una negociación sobre unos términos de referencia, de costos, y todo lo que contempla el estudio de diseño del metro. Sobre eso el Banco Mundial dice si acepta o no acepta”.
“Eso tiene unos trámites en Washington que podrían tomar uno o dos meses, si ellos objetan por alguna razón estamos prestos a corregir, si la razón es estructural habrá que pasar a la segunda empresa que viene en lista, y si no se objeta nada, firmamos el contrato e iniciamos el estudio”.
Entre tanto, la consejera presidencial Gina Parody se reunió con el secretario de Hacienda, Ricardo Bonilla, acordando que el Metro se comenzaría a construir en 2015, recorrería la ciudad de sur a norte y sería subterráneo.
Parody dijo que una vez se conozca el informe del Banco Mundial, “el IDU puede contratar con la empresa ganadora la ingeniería de detalle, es decir, cómo debe ir el Metro para Bogotá”.
Bonilla confirmó que “el Metro pesado en su totalidad como está definido es subterráneo, pero los estudios de ingeniería que comienzan a hacerse tendrán que decir si hay alguna parte en superficie”.