El elegante conjunto residencial Space de Medellín es demolido completamente casi un año después de que una parte de la edificación se derrumbara por fallas estructurales y dejara 12 muertos.
La implosión de las cuatro torres que aún están en pie en el exclusivo barrio El Poblado, en el sureste de Medellín, está programada para las 09H00 (14H00 GMT), indicó la Alcaldía en una rueda de prensa.
Habrá una sola explosión controlada, en la cual toda la estructura "caerá en seis segundos progresivamente y no de golpe seco en la tierra para no causar sismicidad o vibración", explicó a la AFP Rogelio Gómez, gerente de la firma Atila Demoliciones, a cargo del procedimiento.
Una hora antes de la implosión, se evacuarán todas las personas en un radio de 100 metros del complejo residencial y se cerrarán las vías cercanas. Posteriormente, sonarán tres alertas y luego vendrá la detonación de la munición, anunció la Alcaldía, que agregó que recién se retornará a la normalidad cuando la nube de polvo se disipe.
"El edificio lo venimos preparando hace 20 días, perforando las columnas y las vigas para inyectar los explosivos en puntos estratégicos con el fin de que caiga para el lado donde tiene que caer", señaló Gómez.
La decisión de demoler totalmente la estructura se tomó ante al "alto riesgo de colapso" que presentaba, según reveló un estudio de la Universidad de Los Andes contratado por la Alcaldía.
El Edificio Space, una mole de seis torres interconectadas concebida como una estructura curva de altura escalonada, incluía 154 apartamentos de entre 90 y 170 m2 cada uno. Diseñado por el afamado arquitecto Laureano Forero, el complejo fue construido entre 2006 y 2013 por la firma Lérida CDO.
Pero tras la aparición súbita de grietas en algunas vigas, el 12 de octubre de 2013 se produjo el colapso de la torre seis, terminada y entregada en septiembre de ese año.
El derrumbe de esa construcción de 26 pisos, en la que vivían unas 40 familias que habían sido evacuadas por precaución un día antes, provocó la muerte de 11 obreros que intentaban reparar el daño, así como de un residente.
- "Sentimientos encontrados" -
Ante "el estado de ruina e inminente riesgo" de otro colapso, la policía ordenó en enero la demolición total, pero la empresa constructora argumentó que algunas torres se podían rehabilitar.
Finalmente, el 27 de febrero, dada "la grave situación de vulnerabilidad" de la edificación, según la policía, Lérida CDO organizó la implosión, pero únicamente de la torre cinco.
Estudios técnicos, sin embargo, confirmaron que la demolición debía ser completa.
La propuesta de rehabilitación no es viable "considerando que no es consistente (...) ni resuelve temas fundamentales como procedimientos constructivos seguros, ni permite garantizar la seguridad a la vida de los ocupantes futuros", indicó la Alcaldía.
Decidido a garantizar viviendas seguras, el gobierno presentó el lunes un proyecto de ley que busca obligar a las empresas constructoras a responder por "los perjuicios patrimoniales causados a los propietarios afectados por el colapso o amenaza de ruina como consecuencia de deficiencias en el proceso constructivo", de acuerdo con un comunicado del ministerio de Vivienda.
A comienzos de septiembre, la Fiscalía había anunciado que tres responsables de Lérida CDO serían acusados de homicidio culposo. Según el ente acusador, hubo negligencia de la firma, ya que se utilizó concreto de baja resistencia, no se revisaron las memorias y planos estructurales ni se hizo la debida supervisión técnica.
Para algunos propietarios, que pagaron entre 200 y 500 millones de pesos (unos 106.000 y 266.000 dólares) por los apartamentos, la demolición provoca "sentimientos encontrados de tristeza y desolación", según dijo Santiago Uribe, portavoz de los afectados, al diario El Colombiano.
Para otros, sin embargo, la implosión permitirá poner fin a una etapa. "Estamos mirando la posibilidad de ir juntos a presenciarla", aseguró al mismo diario Carlos Ruiz García, otro vocero de las 128 familias damnificadas.