Una fábrica ilegal que falsificaba todo tipo de licor para ser distribuido en las localidades de Kennedy y San Cristóbal Sur en Bogotá fue desmantelada gracias a la labor conjunta de la Policía Metropolitana de Bogotá y el Grupo Especial Anticontrabando de la gobernación de Cundinamarca (Gracc). La acción permitió también la desarticulación de la banda de adulteradores denominada Los Costeños.
Los delincuentes tenían listos para su distribución en establecimientos comerciales de varias localidades de Bogotá 3.000 unidades de licor adulterado y más de 80.000 litros de alcohol. En total, fueron aprehendidos cerca de 30.000 elementos entre estampillas falsas, etiquetas, cartones, tapas, envases de vidrio y de cartón fabricados allí mismo y con precarias condiciones sanitarias. En el lugar se encontró también maquinaria para el empaque de productos en envases tetrapack. “Esto confirma y ratifica el compromiso que tiene el gobierno departamental, en cabeza de nuestro gobernador Álvaro Cruz, en la lucha frontal contra el contrabando y la adulteración de licores. Esto resultados forman parte de toda una planeación que se ha venido realizando en dos frentes: uno por el lado educativo y cultural en donde vamos a capacitar a las autoridades y también a tenderos comerciantes, distribuidores, dueños de bares y discotecas para que sepan que sanciones pueden llegar a tener si continúan expendiendo este tipo de licores”, afirmó Octavio Villamarín, secretario de Hacienda de Cundinamarca.
El funcionario explicó también que el nuevo Estatuto de Rentas del departamento contemplará el cierre del establecimiento que se encuentre con licor adulterado o de contrabando y que en el proyecto de ley anticontrabando se contempla la extinción de dominio del bien en donde se ha incautado esta mercancía. “Vamos por el camino correcto y seguiremos trabajando de manera articulada con todas las autoridades porque tenemos que bajar la evasión de impuestos con la que se pierden alrededor de 250.000 millones de pesos al año. Cada persona de Cundinamarca pierde 100.000 pesos al año por este flagelo. Además, de todos los efectos nocivos sobre la salud como la afectación de las vías digestivas y la pérdida de la visión y en algunos casos de la vida”.
En cuanto a las bebidas alcohólicas, estas eran producidos de forma artesanal lo que supone el no cumplimiento de las condiciones de salubridad y el consecuente atentando contra la vida de la ciudadanía. La banda de adulteradores Los Costeños, que según datos suministrados por la Policía, era una de las más grandes de la ciudad en el mercado del licor falsificado, fue seguida por varios meses lo que facilitó su desarticulación. Dicha organización no solamente producía para distribuir directamente sino que tenía una red de distribución.
Vale recordar que este tipo de operativos se realiza en desarrollo del convenio interadministrativo anticontrabando firmado en noviembre de 2012 por el departamento de Cundinamarca y la Federación Nacional de Departamentos por un valor cercano a los 1.618 millones de pesos, con el fin de aunar esfuerzos para desarrollar estrategias encaminadas a apoyar la lucha del departamento contra la introducción ilegal de cigarrillos y licores, tanto auténticos como falsificados y el diseño y puesta en marcha de los planes operativos contra el comercio de estos ilegales y de mecanismos preventivos para evitar la evasión fiscal y el contrabando.