En el marco del ‘Plan Choque’ vamos seguros, la Policía Metropolitana de Bogotá, en desarrollo de operativos contra organizaciones delincuenciales, desmanteló en las últimas horas una banda de piratería terrestre que interceptaba vehículos de carga tipo furgón en Bogotá
Con base a las denuncias realizadas por las víctimas y mediante información suministrada por fuente humana, investigadores de la Seccional de Investigación Criminal – SIJIN, en coordinación con la Fiscalía General de la Nación, iniciaron un proceso investigativo con el fin de lograr la individualización y captura de esta banda que al parecer delinquía desde hace 2 años y estaría inmersa en por lo menos 35 casos en Bogotá y municipios aledaños de Cundinamarca.
En pocas semanas, después de iniciada la investigación se evidenció el ‘modus operandi’ y la relación con 20 casos comprobados mediante denuncias de transportadores, quienes aseveraban ser atracados por ‘falsos policías’ mediante la utilización de falsos puestos de control, en parajes cercanos a Bogotá y en lugares solitarios de la ciudad que son frecuentemente utilizados por transportadores a altas horas de la noche o la madrugada.
Esta banda tenía como particularidad, la interceptación de vehículos grandes de carga tipo furgón de reconocidas empresas que transportaban electrodomésticos y tecnología, mediante la intimidación con armas de fuego a los conductores a quienes les hurtaban la mercancía junto con los vehículos.
La investigación logró determinar que los sujetos vestían prendas similares a las utilizadas por la Policía Nacional, hacían detener los automotores y una vez se encontraba en estado de indefensión el conductor, hurtaban el vehículo y la mercancía transportada.
De acuerdo con la investigación, Carlos Niño Torraba alias ‘El Mocho’ el cabecilla de la banda, era quien determinaba los vehículos a interceptar y los lugares donde se realizarían los hurtos, hacían efectivo el falso puesto de control en el que pudieron hurtar más de 20 camiones y mercancía cuyo valor estaría avaluado en más de 2.700 millones de pesos.
En los allanamientos realizados a las residencias de estos delincuentes en las localidades de San Cristóbal, Bosa, Puente Aranda Santa Fé y Usme, les fueron encontradas dos uniformes de la Policía Nacional, uno del Ejército Nacional, así como también material de intendencia, cuatro equipos de comunicaciones Avantel y ocho celulares.
En las últimas horas estos sujetos fueron dejados ante un Juez con control de garantías para responder por los delitos de concierto para delinquir, hurto agravado y calificado, porte ilegal de armas de fuego, secuestro simple, utilización de uniformes e insignias de uso privativo de la Fuerza pública y podrían estar inmersos a pagar una condena de entre 18 y 25 años.