Tras la suspensión de 'Drácula-Suárez', la otra gran estrella de Uruguay, Edinson Cavani, tendrá que asumir la responsabilidad del ataque celeste el sábado en el partido de octavos contra Colombia, la ocasión del delantero de brillar en un Mundial en el que, hasta ahora, pasó desapercibido.

Esta vez todos los focos estarán dirigidos hacia él. Tras compartir protagonismo durante la temporada del París Saint-Germain con el sueco Zlatan Ibrahimovic, Cavani debía contentarse en Brasil con estar en un segundo plano ante la voraz personalidad de Suárez.

La dura sanción al jugador del Liverpool (nueve partidos de sanción y cuatro meses sin fútbol) no ha sido una buena noticia para Uruguay, ni tampoco para Cavani, pero quizá sea la manera de que el 'Matador' sea protagonista.

Por el momento, Cavani fue casi transparente. Marcó un gol, de penal, en el estreno contra Costa Rica, cuando jugó en punta con Diego Forlán porque Suárez aún no estaba al 100% físicamente, pero ese día la Celeste acabó perdiendo sorprendentemente (3-1) contra la selección centroamericana y el delantero del PSG hizo poco más que el tanto desde los once metros.

Ante Inglaterra, Cavani ya compartió la punta del ataque con Suárez, pero los aplausos fueron para 'Luisito', autor de los dos goles que derrotaron a los ingleses (2-1), aunque Edinson fue el autor del majestuoso pase al delantero del Liverpool en el tanto que abrió el marcador.

El seleccionador uruguayo Oscar Washington Tabárez defendió su trabajo: "Cavani jugó un papel muy importante para neutralizar su juego", dijo tras vencer a los ingleses.

"Quizá estuvo muy prudente", añadió el técnico, que lamentó que "en ciertos momentos perdimos nuestro sistema", lo que no puede interpretarse como una crítica al jugador.

Contra Italia, en el partido decisivo, todo quedó eclipsado por el mordisco de Suárez a Giorgio Chiellini y el gol de la clasificación marcado por el central Diego Godín.

De momento, el balance es más bien escaso para un jugador por el que el París SG pagó 64 millones de euros al Nápoles para contratarle en el verano europeo del 2013. Un precio de estrella.

La historia de la Copa del Mundo está llena de protagonistas que comenzaron de puntillas, como los italianos Paolo Rossi en 1982 o Roberto Baggio en 1994, antes de explotar en la fase de eliminación directa y cumplir con las expectativas depositadas en ellos.

- Habituado a la presión -

"La presión yo la tengo cada vez que entro en la cancha", dijo Cavani antes del primer partido del Mundial, cuando se enfrentó a la misma situación que el sábado contra Colombia: minimizar la ausencia de Suárez.

"Soy siempre muy exigente conmigo mismo y trato siempre de dar lo máximo", añadió.

Aunque no haya marcado de jugada en Brasil, lo que nunca se puede negar a Cavani es su combatividad y entrega total, ayudando siempre en el repliegue defensivo tanto en la selección como en su equipo, donde además está desplazado a la banda.

"No es fácil para un delantero habituado a marcar tener que asumir tareas defensivas", admitió durante el transcurso de la temporada francesa.

Para el choque contra Colombia, Cavani volverá a su puesto de predilección, el de 'Matador', el que le lanzó al estrellato en el Nápoles.

Y ya marcó dos goles a los 'cafeteros' en la fase de clasificación, en Montevideo (2-0).