Catar firmó un multimillonario contrato con la compañía francesa Dassault el lunes para comprar 24 aviones de combate Rafale, en una ceremonia en Doha en presencia del presidente francés, François Hollande y del emir de Catar, el jeque Tamim ben Hamad Al Thani.
El contrato fue firmado por el director ejecutivo de Dassault, Eric Trappier, y el general catarí Ahmed al Malki, quien supervisó las negociaciones del contrato, de 6.300 millones de euros (USD 7.000 millones).
El presidente francés le dijo a Malki durante la ceremonia que Catar había hecho una "buena elección" con la compra de los aviones, informó un corresponsal de AFP.
Además, el general Malki y Antoine Bouvier, director general de MBDA, fabricante europeo de misiles que provee el armamento de los Rafale, firmaron otro contrato.
Por otro lado, el ministro francés de Defensa, Jean-Yves Le Drian y su homólogo catarí, Hamad ben Alí al Attiyah, firmaron otro acuerdo confidencial entre ambos estados.
El documento trataría sobre la formación de 36 pilotos y de un centenar de mecánicos, así como sobre otras cuestiones como la instrucción de los oficiales de inteligencia.
Trappier afirmó que la ceremonia era "una satisfacción para Dassault, una gran satisfacción para Francia" y "el resultado de un gran trabajo en equipo".
Se trata del tercer contrato de venta de aviones Rafale en el extranjero, después de los de Egipto (24 naves, anunciado en febrero) e India (36 aviones, anunciado en abril). Además, Le Drian viajó a Emiratos Árabes Unidos donde habló sobre el cazabombardero francés.
- Sin contrapartidas -
François Hollande se felicitó de que Francia sea "vista como un país fiable" y afirmó que no había "contrapartidas" por parte de París a la compra de los Rafale.
"Hay conversaciones en curso en otros ámbitos con Catar, con otros países, para la atribución de líneas aéreas, pero este contrato no ha sido objeto de negociaciones sobre temas diferentes del avión Rafale y de los materiales que deben equiparlo", declaró.
El presidente francés se entrevistó con el emir de Catar sobre las múltiples crisis que afectan a la región, empezando por el conflicto en el vecino Yemen, que está en la agenda de una cumbre extraordinaria del Consejo de Cooperación del Golfo, (CCG), en el el que Hollande será invitado de honor.
Cinco de la seis monarquías del Golfo, miembros del CCG, forman parte de la coalición árabe, dirigida por Arabia Saudita, que lleva a cabo bombardeos aéreos en Yemen para impedir que la rebelión chiita, apoyada por Irán, tome el control de este país de la península arábiga.
Hollande viajará por la tarde a Arabia Saudita, donde se entrevistará con el rey Salman y se convertirá así en el primer jefe de Estado occidental recibido en Arabia Saudita tras la amplia remodelación ministerial decidida la semana pasada en este país, primer exportador mundial de petróleo.