Cataluña y España están "cansadas" una de otra, afirmó el jueves, dos días después de una masiva marcha independentista en Barcelona, el presidente de esa gran región asfixiada por la crisis, comparando su relación con la que existe entre el norte y el sur de Europa.
"La Europa del norte se ha cansado de la Europa del sur" y viceversa, afirmó el nacionalista Artur Mas en un encuentro con periodistas en Madrid. Del mismo modo, "entre Cataluña y España creo que se está produciendo un sentimiento de fatiga que yo creo es fatiga mutua", agregó.
"Cataluña se ha cansado de no poder progresar como cree que podría hacerlo dentro de este conjunto del Estado español, y creo que España se cansa de la forma de hacer de Cataluña" porque tiene "la sensación que Cataluña siempre pide y siempre se queja", precisó.
Con gritos de "¡Independencia!" y bajo el eslogan "Cataluña, nuevo Estado de Europa", un millón y medio de personas, según la policía, se manifestaron el martes en Barcelona con motivo de la fiesta nacional catalana, convocadas por los independentistas que reclaman el control de los impuestos regionales.
El gobierno autónomo catalán, dirigido por los nacionalistas de CiU, habían llamado a participar en la marcha en un momento en que presiona al ejecutivo central de Madrid para negociar un nuevo sistema fiscal.
A este efecto, Mas tiene previsto reunirse con el jefe del gobierno español, Mariano Rajoy, el 20 de septiembre en Madrid.
Con cerca de 200.000 millones de euros, Cataluña aporta una quinta parte del PIB anual del país, pero es también la región más endeudada de España, con una deuda pública de 42.000 millones de euros.
Incapaz de hacer frente sola a sus vencimientos de deuda, a finales de agosto tuvo que pedir una ayuda de 5.023 millones de euros al Estado central.
Mas, que el miércoles reclamó "estructuras de Estado" para responder al "anhelo de libertad" de Cataluña, llamó el jueves a organizar una consulta popular.
"Consultémoslo a los que pretenden ser nación", propuso, pese a que la organización de un referéndum de autodeterminación es contrario a la Constitución española.