El Mandatario destacó que la lucha contra la corrupción es uno de los principales objetivos del Gobierno. “El Secretario de Transparencia va ser un asesor directo del Presidente, va ser el Secretario Técnico de la Comisión Nacional para la Moralización”, señaló el Jefe de Estado.

 

La nueva Secretaría Anticorrupción y Transparencia será una posición con “dientes y con una institucionalidad detrás”.

 

Así lo afirmó este miércoles el Presidente Juan Manuel Santos al posesionar a Carlos Fernando Galán como Secretario Anticorrupción.

 

El Jefe de Estado señaló que esta labor será muy importante y contará con el respaldo directo del Presidente de la República. Recordó que uno de los objetivos, desde el primer día de Gobierno fue la lucha contra la corrupción y por ello la importancia de esta Secretaría.

 

“El Secretario de Transparencia va ser un asesor directo del Presidente, va ser el Secretario Técnico de la Comisión Nacional para la Moralización, va a coordinar el diseño de la política integral contra la corrupción, va a implementar un observatorio de corrupción y transparencia, va a crear un índice de transparencia”, explicó el Mandatario.

 

Añadió que la Secretaría Anticorrupción y de Transparencia también estará al frente de los compromisos internacionales en esa materia, pues buena parte de la corrupción es transnacional y la cooperación internacional en esta área es muy importante para Colombia.

 

El Presidente Santos destacó que en materia internacional “Colombia tendría una autoridad moral para agregarle a la lucha contra el soborno, el lavado de activos”, teniendo en cuenta que la OEA cuenta con la Comisión de la Lucha contra el Soborno.

 

Ante la importancia de esta labor a nivel nacional e internacional, el Mandatario resaltó la experiencia y carácter de Carlos Fernando Galán, quien con su juventud impulsará la lucha contra la corrupción en el país.

 

Puntualizó que esta Secretaría será una pieza clave dentro de la política de la lucha contra la corrupción y por la transparencia en cada uno de los actos del Estado.