Después de 9 horas de discusión, la Asamblea de Caquetá aprobó en primer debate el Proyecto de Ordenanza por medio del cual se autoriza el cobro de la estampilla pro-electrificación rural, según informó el presidente de la corporación William Sánchez Amaya.
Existía una Ley que autorizaba tal cobro, pero perdió vigencia, por eso el Congreso aprobó el pasado 17 de julio un proyecto de ley que faculta a la Asamblea para que hasta por 20 años implemente otra vez la estampilla.
Lo anterior con dos particularidades: la primera que los ingresos no pueden ser inferiores a los que se recibían el año anterior, o sea que se debe manejar la misma tarifa que es del 3%, y la segunda, que se busca solucionar los problemas de energía eléctrica para las zonas de difícil acceso, incluso se puede hacer con cualquier modelo alternativo, ya sea una rueda Pelton, plantas o con energía solar.
Sánchez Amaya recordó que estuvo en desacuerdo cuando hace un tiempo desde el Gobierno departamental se quiso exonerar los convenios del cobro de la estampilla, y de esa manera se perdían importantes recursos para electrificación. Además dijo que iba a proponer que se exonere del cobro de la estampilla a los funcionarios que se posesionen, puesto que sus salarios son escasos, e incluso, la mayoría están por debajo del promedio de lo que se les paga en la alcaldía.