Capturan sicarios colombianos en Madrid | El Nuevo Siglo
Lunes, 25 de Febrero de 2013

La policía española detuvo en Madrid a siete presuntos sicarios colombianos, dedicados a efectuar ajustes de cuentas en forma de asesinatos, secuestros o palizas, por encargo principalmente de narcotraficantes, informó la policía española.

Entre los detenidos se encuentra el cabecilla de esta "oficina de cobros", identificado sólo como S.G.Q, alias "El conejo", y su lugarteniente, conocido como "El monstruo", sobre quien pesaba una orden de detención internacional emitida por Colombia por asesinato.

Algunos de los detenidos eran antiguos paramilitares colombianos de las Autodefensas Unidas de Colombia, según la policía española.

El objetivo de esta organización "era realizar ajustes de cuentas derivados del impago de las deudas del narcotráfico para lo que contemplaban secuestros, amenazas, lesiones y homicidios", dijo en rueda de prensa el secretario de Estado de Seguridad español, Francisco Martínez.

En la operación, la policía intervino una furgoneta de alquiler en la que se incautó de "1 lanzagranadas antitanque, detonadores, 5 fusiles y pistolas con silenciador, 1 rifle con mira telescópica, 1 revólver y 2 escopetas, así como una sustancia compacta que está siendo analizada para determinar si se trata de material explosivo".

El grupo actuaba desde un restaurante en Leganés, al sudoeste de Madrid, que servía de "tapadera" a la red y cobraban hasta el 50% de la deuda de la víctima.

Según el jefe de la Unidad contra la Delincuencia y el Crimen Organizado (UDYCO) de la policía española, Eloy Quirós, esta organización "no había llegado a hacer ningún asesinato aunque sí un secuestro de un día y amenazas" en España, cuyas víctimas fueron un español y un colombiano.

El cabecilla de la red también estaba "inmerso en una guerra en Colombia contra otra 'oficina de cobros', responsable del asesinato de su hermano", según la policía española.

Además, la célula había entrado en contacto "con un supuesto integrante de un cártel mexicano, a quien entregarían diversas armas de fuego que recibirían en breve para cometer varios ajustes de cuentas, principalmente en la provincia de Valencia" (este de España).

En septiembre de 2010, la policía española ya había detenido a dos sicarios colombianos que también "formaban parte de 'oficinas de cobro' a sueldo de carteles de la droga y se habían asentado en España con la intención de continuar con sus actividades".

Estas "oficinas" son organizaciones vinculadas a los carteles de la droga colombianos que se dedican a la ejecución de asesinatos selectivos, extorsiones y secuestros, entre otros, a petición de las redes de narcotraficantes, explicó entonces la policía española.

AFP