El CTI de la Fiscalía capturó a los subintendentes de la Policía Albeiro Castro y Óscar Orejarena por requerimiento del Juzgado Quito Penal del circuito de Santa Marta por la presunta comisión del delito de secuestro extorsivo.
Los agentes fueron puestos a disposición del citado ente judicial que los envió a la prisión de Sabanalarga, Atlántico. Los hechos que generaron la investigación se dieron el 4 de enero de 2012, cuando una patrulla de la Policía adscrita a la estación Ariguaní, Magdalena realizaba un retén en la vereda Buena Vista.
En el automotor de placas QHT 265 viajaban Augusto Castro Pacheco, (contra quien existía orden de captura), Claudia Margarita Sánchez Campo y Jorge Augusto Castro Sanchez. El agente de Policía Albeiro Castro les pidió descender del vehículo y parece que exigió a Augusto Castro Pacheco cien millones de pesos para no atentar contra su vida.
Tras una breve negociación, al parecer se acordó el pago de cincuenta millones de pesos. Jorge Augusto Castro Sánchez y Claudia Margarita Sánchez Campo dejaron a Castro Pacheco detenido como garantía de que volverían con el dinero.
Solo alcanzaron a recaudar 35 millones de pesos, que les entregaron a los agentes y Castro Pacheco quedó en libertad a las pocas horas.
Los policías capturados fueron dejados a disposición del Juzgado 5 Penal del circuito con funciones de conocimiento, quien les otorgó una medida de aseguramiento en establecimiento carcelario de Sabanalarga.