La Dirección de Investigación Criminal e Interpol capturó en las últimas horas a dos ciudadanos colombianos solicitados por delitos relacionados con el tráfico de estupefacientes en Estados Unidos, Perú y en España.
La primera captura, en Itagüí, fue la de Juan Reinaldo Ramírez, quien conformó una organización delincuencial, encargada de la introducción de cocaína a territorio Estadounidense, a través de la importación de prendas textiles procedentes de Centroamérica en cuyo interior se ocultaba la sustancia estupefaciente.
Es responsable de coordinar todo el operativo diseñado para que 400 kilogramos de cocaína producida por organizaciones delincuenciales en Colombia tuvieran como destino final la ciudad de Miami (Florida).
Ramírez Rendón, quedó en libertad luego de pagar tres años de condena en República Dominicana, en donde en un operativo adelantado se le incautaron 95 kilogramos de cocaína que tenía oculta en una vivienda adecuada especialmente para el procesamiento y almacenamiento de sustancia estupefaciente, donde emprendió su huída hacia territorio colombiano y así evitar ser puesto a disposición de las autoridades judiciales de Estados Unidos.
En Colombia Juan Reinaldo Ramírez, realizaba las coordinaciones pertinentes para cumplir a cabalidad con los trámites requeridos por las autoridades de control para la importación de ese tipo de mercancía, de forma paralela una célula de esta organización bajo la supervisión de dicha persona realizaba pequeños envíos desde Colombia directamente a los Estados Unidos para así evitar la incautación de grandes cantidades y logrando que los envíos pasaran desapercibidos.
La investigación se completó mediante seguimientos y vigilancias de agentes de la DEA que dio lugar a la recolección de evidencia necesaria para determinar la plena participación de Juan Reinaldo Ramírez Rendón de realizar las gestiones necesarias para la importación de cocaína a territorio Estadounidense donde se realiza su comercialización, en donde es solicitado por la corte del Distrito sur de Nueva York, por el delito de conspiración para distribuir con la finalidad de ingresar cocaína a los Estados Unidos.
Una segunda operación, en la capital de Antioquia, fue capturado Néstor José Ávalos quien hacía parte de una red criminal dedicada al transporte y distribución de cocaína en territorio peruano a través de camiones de carga que adaptaban con caletas para esconder la sustancia estupefaciente.
Ávalos era el responsable de coordinar todo el dispositivo diseñado para que la cocaína producida por organizaciones delincuenciales del Perú tuviera como destino final estructuras que operan en lo largo y ancho del continente europeo, específicamente en la Península Ibérica.
Gracias a la investigación adelantada durante un año en coordinación con la Policía peruana, se estableció que Néstor José Ávalos Berrío se ocultaba en Medellín en casa de unos familiares y donde fue capturado en un sector exclusivo de la ciudad para cumplir la extradición en cumplimiento a la circular roja, para que comparezca ante el Cuarto Juzgado Penal Supra Provincial de Lima (Perú), por el “Delito Contra la Salud Publica Modalidad Tráfico Ilícito de Drogas”.
Finalmente, en una acción de la Dijín en el municipio de Dosquebradas (Risaralda), fue detenido John Edward Medina, un narcotraficante solicitado en extracción por España por delitos relacionados con el tráfico de estupefacientes en el viejo continente a comienzos de 2008.
Medina León es considerado como el principal enlace de la organización delincuencial dedicada al tráfico de drogas en el continente europeo. Para ello se trasladó a España en el año 2008 donde tomó contacto con diferentes redes de narcotráfico que transportaban grandes cantidades de cocaína con el fin de comercializar el alucinógeno a través de sus contactos en el mercado negro de Madrid y Barcelona.
El pasado marzo la Policía española capturó en la ciudad de Madrid (España) a siete integrantes de la organización de Medina León, a quienes se les incautaron 168 kilos de cocaína, 310.905 euros (producto de la comercialización de la sustancia estupefaciente) y cuatro armas de fuego tipo pistola. De inmediato John Medina huyó a Colombia para escapar de la justicia. A partir de esta operación, se inició el cruce de información entre Colombia y España, con el fin de expedir su captura internacional amparada con la circular roja de Interpol.
Su detención se produjo en un sector exclusivo del municipio de Dosquebradas, Risaralda.