El ministro del Interior y Transporte de Argentina, Florencio Randazzo, retiró su precandidatura presidencial dejando el campo libre a su competidor, el gobernador Daniel Scioli, ungido por la presidenta Cristina Kirchner como único postulante oficialista para las elecciones de octubre.
Randazzo "desistió de participar como precandidato a presidente de la nación y no ha querido participar como candidato a gobernador por la provincia de Buenos Aires. No obstante, sigue como ministro", informó el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, al ingresar a la Casa Rosada, sede de la Presidencia.
La decisión de Randazzo fue tomada luego de que Kirchner inclinara la balanza en favor de Scioli, quien sorprendió la noche del martes al anunciar que su compañero de fórmula será Carlos Zannini, ideólogo y principal operador político del gobierno desde la Secretaría de Legal y Técnica.
El sábado cerrará la inscripción de candidatos para las primarias generales y obligatorias del 9 de agosto.
Randazzo, quien era visto como el precandidato más afín a la presidenta pero desfavorecido en los sondeos, mantuvo el miércoles una larga reunión con Kirchner, quien le ofreció que se postule a la gobernación del mayor distrito.
"Soy un hombre de palabra, creo en los compromisos asumidos. No borro con el codo lo que escribo con la mano, por eso no puedo aceptar ser candidato a gobernador", escribió Randazzo en una carta a Kirchner, cuyo contenido fue divulgado por la prensa.
El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, anunció en conferencia de prensa que él mismo, el alcalde de la populosa circunscripción de La Matanza, en la provincia de Buenos Aires, Fernando Espinoza, y el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, competirán en las primarias por ser el candidato del oficialismo a la gobernación de Buenos Aires.
"La presidenta no ha cerrado la puerta para que quien quisiera presentarse a competir lo haga", dijo tras una extensa reunión con la mandataria, aunque nadie espera que Randazzo dé marcha atrás.
- Presidente sí, gobernador no -
Randazzo, que exhibe una eficiente gestión, había anticipado en varias ocasiones que sólo le interesaba la carrera a la presidencia, de la que fue instado a retirarse por la propia Kirchner.
Scioli encabeza las encuestas para los comicios generales del 25 de octubre, en los que Kirchner no puede aspirar a la reelección. La presencia de Zannini en la fórmula marca un intento de asegurar la continuidad del proyecto de centroizquierda iniciado hace 12 años.
"Acepto con tristeza pero sin el más mínimo rencor no poder competir por la Presidencia y celebro la decisión de que sea Carlos Zannini quien se constituya en garantía de que nada de lo conquistado se perderá. Es un amigo en el que podemos confiar", escribió Randazzo.
Randazzo se comprometió a seguir hasta diciembre en el ministerio que ocupa desde el primer mandato de Kirchner.
El alcalde de Buenos Aires, Mauricio Macri, quien pisa más firme como precandidato de la oposición de derecha, dijo que anunciará el viernes su compañero de fórmula/AFP.