Cancillería envío nota de protesta a Nicaragua | El Nuevo Siglo
Jueves, 11 de Octubre de 2012

El gobierno de Colombia negó este jueves cualquier hostilidad contra un buque de Nicaragua que incursionó en aguas en disputa judicial por límites marinos, y acusó a Managua de actuar con desespero ante la proximidad del fallo de la Corte Internacional de Justicia.

El barco, que según la ministra de Relaciones Exteriores María Ángela Holguín ingresó el miércoles a aguas de la jurisdicción colombiana, regresó a aguas nicaragüenses luego de una "invitación pacífica" de la Armada de Colombia (Marina de guerra).

Tras revelar que Colombia envió una nota de protesta a la Cancillería de Nicaragua a través de la embajadora colombiana en Managua, Holguín calificó la incursión de la embarcación como un "acto de desespero", en una breve declaración a periodistas para pronunciarse sobre ese hecho.

"Lo que nosotros vemos es que esto sí es un acto de desespero de Nicaragua en vísperas de la comunicación por parte de la Corte de un fallo que ha elaborado después de once años de este proceso", dijo.

Colombia y Nicaragua esperan que antes de final de año la Corte Internacional de Justicia de La Haya falle sobre una demanda que Managua presentó hace más de una década para reclamar la soberanía de varios islotes en una franja del mar Caribe con gran potencial en recursos naturales.

Los nicaragüenses pretenden que la delimitación territorial se haga entre las costas de ambos países o entre las plataformas continentales y no, como sostiene Colombia, entre la plataforma continental nicaragüense y el archipiélago de San Andrés y Providencia, territorio insular colombiano cuya soberanía le ratificó la Corte.

La canciller colombiana se refirió además a una declaración del gobierno de Nicaragua sobre la incursión de la embarcación, y contrariando lo expresado por Managua dijo que "el barco entró a aguas de jurisdicción colombiana con la pretensión de llegar a (el cayo de) Quitasueños para hacer una investigación de pesca en el área".

"Por esta razón la Armada, de manera pacífica, siguiendo los procedimientos normales en este tipo de circunstancias, lo invitó a abandonar las aguas de jurisdicción colombiana", agregó.

En su pronunciamiento este jueves, Managua aseguró que naves de guerra colombianas en "actitud hostil" interceptaron la embarcación.

Dos naves de guerra colombianas, la ARC-53 (Antioquia) y ARC-161 (Cartagena), en "actitud hostil" interceptaron a la embarcación civil nicaragüense "Medepesca II", mientras un avión RC-130 Hércules hacía sobrevuelos "en actitud intimidante", dijo la cancillería nicaragüense en una nota de prensa.

Además dijo que la acción de las naves colombianas es una "violación a la soberanía nacional" y una actitud "inamistosa" que violentan la convivencia internacional y no abonan a las relaciones entre países vecinos.

De acuerdo con el ministro de Defensa de Colombia, Juan Carlos Pinzón, el acto fue un "hecho violatorio de la soberanía de Colombia".

El funcionario señaló que el buque es propiedad del gobierno de Nicaragua y fue interceptado la tarde del miércoles por la Armada Nacional en aguas colombianas, a 13 millas náuticas al este del meridiano 82.

El capitán del barco explicó que se dirigía al cayo Quitasueño para realizar estudios pesqueros y se negó a dar media vuelta, argumentando que para ello debía recibir "claras instrucciones del gobierno de Nicaragua", según explicó la Armada colombiana en un comunicado.