Si en la mesa familiar uno de los temas será sobre la mejor opción para manejar los destinos de la capital del país ¿cómo será en los corrillos políticos? Al día siguiente que los colombianos reeligieron en la presidencia de la República a Juan Manuel Santos, comenzó la campaña por la Alcaldía de Bogotá.
Mientras en el segundo semestre de 2014 se lanzó más de una docena de precandidatos a la Alcaldía para el primer semestre de este año, seguramente quedarán cinco aspirantes avalados por los partidos y movimientos. Por lo regular en los dos últimos meses de la campaña el debate queda centrado en dos o tres candidatos que ocupan los primeros puestos en las encuestas.
Hoy, primer día hábil del año, se puede indicar que la fórmula que utilizaría la mayoría de partidos y movimientos políticos para escoger candidato oficial es la consulta que sería en junio o en su defecto en las asambleas que se realizarán en el primer trimestre.
La primera precandidata que se lanzó para las elecciones del 25 de octubre fue Clara López Obregón del Polo Democrático Alternativo, pocas horas después de los resultados de la primera vuelta presidencial, donde obtuvo más de dos millones de votos como aspirante a la Presidencia de la República.
Aunque se afirmó que era desgastante una campaña por más de dieciséis meses desde que López Obregón anunció el pasado 15 de junio en la noche sus intenciones de llegar al Palacio Liévano, después que perdiera en la primera vuelta presidencial, se ha sostenido en las encuestas como primera opción para los bogotanos.
Una de las piedras en el zapato que deberá resolver la presidenta del Polo Democrático con la dirigencia de la colectividad, es la unión a la campaña del presidente Juan Manuel Santos para la segunda vuelta porque causó malestar.
En las toldas oficialistas, con el movimiento de fichas en los Progresistas al presentar oficialmente a tres precandidatos, la baraja de aspirantes al segundo cargo público más importante en Colombia creció como espuma. Oficialmente hay nueve intenciones de manejar a Bogotá entre 2016-2019 y tres, por ahora se encuentran analizando el panorama electoral.
Los abanderados del alcalde Mayor de Bogotá, Gustavo Petro, en el extinto movimiento Progresistas son Hollman Morris, María Mercedes Maldonado y Guillermo Alfonso Jaramillo, los tres fueron funcionarios de la actual administración y entera confianza del mandatario.
En la Alianza Verde la asamblea distrital escogió como precandidatos a los concejales Antonio Sanguino y Carlos Vicente de Roux y quedaron a la espera de una respuesta del exalcalde Enrique Peñalosa y del exsenador Camilo Romero.
Mientras siguen los movimientos de fichas para acomodar las elecciones del 25 de octubre de 2015 en los partidos políticos, tanto la exalcaldesa designada Clara López, del Polo Democrático, como el exalcalde encargado Rafael Pardo, del Partido Liberal, siguen en lo alto de las encuestas.
En este mismo ramillete de precandidatos está el exvicepresidente Francisco Santos por el Centro Democrático, quien sería el único que tiene asegurada la candidatura oficial. Supuestamente en febrero la convención nacional oficializará la aclamación de Santos.
Además de la incertidumbre por la participación de Peñalosa en las elecciones de octubre de 2015, el exvicepresidente Angelino Garzón, inicialmente le hizo cocos a la Alianza Verde donde manifestó su interés de trabajar por un pacto político y social por el presente y futuro de la ciudad. Pero después de un fallo judicial, la única alternativa que tiene Garzón para ser candidato es por el Partido de La U donde tampoco tiene nada fijo.
Por el sector independiente está el examigo del alcalde Petro, Álex Vernot, quien ha mostrado interés de participar en la jornada democrática con un movimiento supuestamente propio.
Con estos precandidatos de todas las vertientes políticas, seguramente y antes de agosto de 2015, cuando es el cierre de inscripciones para los candiditos a la Alcaldía, Concejo y JAL, podrían entrar nuevos y fuertes actores que inclinen la balanza para escoger el segundo cargo público más importante del país.
Seguramente serán muchos los que tengan la intención de ser alcalde, pero tan solo uno se posesionará el 1º de enero de 2016 después de año y medio de luchas, no solo en el interior del partido o movimiento que lo avala, sino para lograr el favor del voto de opinión que es el que manda en la capital de la República.
“La campaña empezó tras las presidenciales”
En total hay nueve aspirantes para suceder a Petro y llegar al codiciado Palacio Liévano. /ENS