Cambio Radical optó por dirección colegiada | El Nuevo Siglo
Lunes, 19 de Diciembre de 2011

Por una dirección colegiada se decidió este fin de semana la convención de Cambio Radical.

Los designados son los senadores Juan Carlos Restrepo, Antonio Guerra y Bernabé Celis; los representantes Germán Varón, Carlos Abraham Jiménez y Rosmery Martínez; y el saliente alcalde de Barranquilla, Alex Char, quien sólo asumirá su cargo cuando haya culminado su administración en la capital del Atlántico, el 31 de diciembre.

Los siete nuevos codirectores reemplazan al concejal bogotano Carlos Fernando Galán, quien dimitió para trabajar en el gobierno de Juan Manuel Santos; en su carta de renuncia, precisó que en los próximos días asumirá como secretario de transparencia de la Presidencia de la República.

Galán sostuvo en la misiva que hace cuatro meses asumió las riendas de Cambio Radical en el momento más difícil y que tomó las decisiones por todos conocidas, iniciando un proceso de depuración que le correspondió liderar con la firme convicción de que este partido no merece llamar Cambio Radical si sólo puede ofrecerle a los colombianos más de lo mismo.

Galán agregó que los colombianos no resisten “más parapolítica, más narcopolítica, más farcpolítica, ni más escándalos de corrupción, carruseles de la contratación, ni entidades del Estado podridas”.

“Los colombianos no resisten más políticos en las cárceles ni más partidos a merced de las mafias de los violentos”, manifestó Galán.

El representante Varón dijo que de manera definitiva esa colectividad no le apostará a la reunificación con el Partido Liberal.

“Están equivocados quienes creyeron que seríamos parte de la reunificación”, manifestó.
Varón expresó que la idea de reunificar los partidos Social de Unidad Nacional (La U) y Cambio Radical con el liberalismo se diluyó definitivamente ya que su partido se convirtió en la tercera fuerza política del país y pasó a tener una importante representación en la política.

Ya Galán, aún siendo jefe único de Cambio Radical, había anotado que su colectividad no podía convertirse en un “apéndice” del liberalismo.