Caída del petróleo ya se siente en los mercados | El Nuevo Siglo
Miércoles, 17 de Diciembre de 2014

Aunque aparentemente la caída en picada del precio del petróleo ha aminorado durante esta semana, su descenso por debajo de los 60 dólares el barril tiene preocupados a los productores e inversionistas y su impacto ya se siente en los mercados.

 

El WTI con el que se mide el petróleo que produce Colombia, estaba en 56,38 dólares el barril al cierre de esta edición, mientras el Brent se cotizaba a 60,53 dólares. Sin embargo, en los últimos dos meses, el precio ha caído 40 por ciento y desde que la OPEP tomó la decisión en noviembre pasado de no reducir la extracción de crudo, el valor ha descendido 20 por ciento.

Para las finanzas nacionales, las consecuencias del desplome no serán tan graves en el futuro inmediato, pero sin duda en algunos renglones se siente ya cierta prevención ante las iniciativas de inversión, sobre todo porque el rumbo del petróleo tiene mucho que ver con lo que está sucediendo con el dólar.

 

Optimismo

Aunque no se sabe con certeza hasta dónde podrán aguantar las finanzas sin resentirse por el bajón del combustible, el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, ha dicho que Colombia está en capacidad de asimilar un panorama de bajos precios del petróleo en los mercados internacionales. Afirmó que el país cuenta con el margen y las herramientas necesarias de maniobra para acomodarse a una situación de menores cotizaciones del crudo en el mundo.
“En la medida se debilitan los precios del petróleo, vamos a tener un dólar más alto y seguramente vamos a tener un renovado dinamismo en sectores como la industria y el agro”, subrayó.

 

Agregó que Colombia está preparada para asimilar un escenario de menores precios del petróleo y reiteró que “nosotros tenemos que acomodarnos a esa nueva realidad”.

De acuerdo con los pronósticos de la Agencia Internacional de Energía (AIE), el petróleo continuará bajo presión el 2015. Hace poco, el organismo explicó que la demanda no crece tanto como se esperaba, pese a lo cual no cesa el boom de extracción en Estados Unidos. En consecuencia, los depósitos están cada vez más llenos y los precios bajan.

Sobreoferta

Al mismo tiempo, se estima que la sobreoferta que impera actualmente en el mercado se reducirá, “dado que algunos productores extraerán menos petróleo, en vista de que no les resulta rentable cuando los precios son bajos”.

 

Sin embargo, como Colombia no es un país petrolero ni puede controlar lo que sucede con el mercado, sí debe estar atento con variables económicas que pueden alterar el rumbo tanto del crudo como del dólar.

Uno de estos hechos debe ser lo que decida la Reserva Federal de Estados Unidos.

El analista de Alianza Valores, Felipe Campos, dice que “si las decisiones de la FED favorecen el alza de las tasas de interés, esto podría generar más volatilidad en la cotización del hidrocarburo y por ende del dólar”.

De otra parte, el mercado también debe estar pendiente de lo que decida la Junta Directiva del Banco de la República, sobre sus compras de dólares para reducir la volatilidad de la tasa de cambio.

 

A su vez, el analista Camilo Pérez, del Banco de Bogotá, señala que “a pesar de la caída del precio del petróleo actual, el promedio del año es de 97 dólares, por lo cual los ingresos petroleros para Colombia no se verán afectados durante el 2015. De manera que creemos que el próximo año no debería afectar de manera significativa, porque la actual reforma tributaria debería compensar esa caída”.

Sin embargo indica que “si el otro año el precio del petróleo fluctúa entre 40 dólares y 60 dólares, puede haber problemas fiscales y es probable que se tenga que pasar otra reforma tributaria, o un recorte de gasto importante del Gobierno”.

 

Los efectos

Por otra parte, un informe de la Universidad Nacional, a cargo de la Unidad de Análisis del Mercado Financiero (UAMF) advierte que de continuar la caída de los precios del crudo, el producto interno bruto (PIB) se reduciría 13% para 2021, la inflación subiría 1,8% anual y el desempleo volvería al 12%.

Para entender un poco las implicaciones que tendría esta dinámica en el resto del mundo y en Colombia, la UAMF argumenta -en un artículo de análisis publicado en la última edición de UN Periódico- que este comportamiento tiene aristas económicas y políticas.

Según la UAMF, Colombia tiene una elevada dependencia de la renta petrolera y el Marco Fiscal de Mediano Plazo contempla precios de 99 dólares, así como una producción diaria de 1,1 millones de barriles, pero estos han caído a niveles de 60 dólares y 950.000 barriles.

 

Señala que es urgente para el país desarrollar otros sectores económicos y aumentar sus exportaciones no tradicionales, para mantener el crecimiento a largo plazo, pues no es sostenible apuntalar la demanda agregada solo con mayor gasto del Gobierno, cuando sus ingresos empiezan a menguar.