La última cita del sector caficultor se cerró positivamente en medio de un momento difícil para el agro. Sin embargo, y contra todos los pronósticos, la dirigencia cafetera salió fortalecida pero con un norte claro: que  en una coyuntura actual de bajos precios, Colombia debe seguir trabajando por la alta calidad del grano, de la especie Arábica.

El alto prestigio del grano colombiano, frente a mercados de otras latitudes, se debe precisamente a la calidad de su café. Ese es el valor agregado que siempre ha tenido el país para llegar a mercados exigentes como el de Estados Unidos, Europa, Japón o China.

En la conclusión del Congreso realizado en Bogotá, Carlos Llantén, primer vicepresidente del Congreso, dijo con toda certeza que “uno de los instrumentos para mejorar la calidad de vida de la gente es vender café de calidad más caro y no café inferior más barato. Así nos lo confirman los clientes, los expertos del Gobierno en comercio exterior y la gente que ha estado vinculada al café por tantos años”.

Incluso el director ejecutivo de la Organización Internacional del Café (OIC), el brasileño Robério Oliveira, animó al gremio colombiano a seguir trabajando en la alta calidad y diferenciación del grano que produce. 

Por otra parte, al discutir el futuro del sector, Llantén dijo que
la visión de futuro del gremio se puede y debe discutir en el marco del Pacto Nacional Agropecuario en ciernes. “Hemos hecho la tarea. Hemos trabajado ocho puntos que son el fruto de las discusiones en veredas y comités de cafeteros y de este mismo Congreso Cafetero. Se trata de iniciativas implementables, donde los cafeteros podemos y debemos asumir un rol protagónico”, indicó. 

En lo que se refiere a las deudas cafeteras, concretar el nuevo programa de reactivación cafetera (PRAN) que se tramita en el Congreso y avanzar en materia de fertilizantes más accesibles son retos fundamentales a corto plazo.  
Los grandes avances en materia de innovación por parte de entidades como el Centro Nacional de Investigaciones de Café (Cenicafé), con el desarrollo de nuevas variedades y la construcción de una Plataforma Agroclimática accesible al productor en internet, de Buencafé, con la elaboración de camisetas a partir de plásticos reciclados y la borra del proceso de liofilización, y de Juan Valdez® Café, con el desarrollo de nuevos productos y experiencias de consumo, como la nueva tienda Orígenes en Bogotá, también salieron a relucir.