Con programas para la renovación de cultivos, la fumigación y fertilización se incentiva a los productores
Por Yeimi Díaz M.
Periodista El Nuevo Siglo
PESE A las difíciles condiciones ambientales y la reducción de 33 por ciento en la producción de julio, los cafeteros se declaran optimistas respecto a los niveles de cultivo y esperan producir cerca de 9 millones de sacos en los últimos meses del año.
La caficultora colombiana al igual que varios sectores del agro han soportado en lo corrido del año, diversas alteraciones en sus procesos productivos a causa del invierno, generando así pérdidas para el sector y en algunos casos un desabastecimiento de productos.
En este sentido, las lluvias afectaron significativamente las floraciones del segundo semestre de ese año y consecuentemente la producción que se recolecta 8 meses después.
Además, la mayor humedad generó un aumento de la incidencia del hongo de la roya, que ataca las hojas del cafeto hasta hacerlas caer y afecta la productividad de los árboles susceptibles a esta enfermedad.
Al respecto, el gerente general de la Federación Nacional de Cafeteros, Luis Genaro Muñoz Ortega, habló con EL NUEVO SIGLO, de los resultados y de cómo el café sigue siendo un producto relevante para el campo colombiano y para la viabilidad y sostenibilidad del país.
EL NUEVO SIGLO: ¿Cómo fue la producción en julio?
LUIS GENARO MUÑOZ ORTEGA: Durante julio, la producción de café llegó a los 530 mil sacos de 60 kilos, descendiendo un 33 por ciento frente a los 787 mil sacos de la cosecha del séptimo mes de 2010.
ENS: ¿Y los resultados del primer trimestre de 2011?
LGMO: Un crecimiento de 36,6 por ciento del sector cafetero en el primer trimestre de 2011, está fundamentado en la recuperación de la producción cafetera, en medio de condiciones ambientales muy difíciles y sin precedentes en la historia reciente del país.
ENS: ¿Los resultados afectaron el comportamiento del semestre?
LGMO: No, en lo corrido del presente año civil (enero-julio) Colombia, principal abastecedor mundial de café suave arábico lavado, registró una producción de 4,6 millones de sacos de 60 kilos, levemente inferior a los 4,8 millones de sacos cosechados durante los siete primeros meses de 2010.
ENS: ¿Y en lo corrido del año cafetero?
LGMO: La cosecha cafetera registrada entre agosto de 2010 y julio de 2011 creció 12 por ciento a 8,7 millones de sacos de 60 kilos frente a los 7,8 millones de sacos producidos en el mismo periodo anterior. Por su parte, durante los diez primeros meses del año cafetero (octubre 2010- julio 2011) la producción registrada en Colombia fue de 7,6 millones de sacos, un 9 por ciento más, si se compara con los 6,9 millones de sacos cosechados en igual periodo anterior.
ENS: ¿Cómo afectó el invierno a la producción?
LGMO: La producción esta muy influenciada por las condiciones climáticas imperantes en el país ocho meses atrás, que es el tiempo que tardan en desarrollarse las cerezas de café después de la floración. Para que los cafetales florezcan son necesarias condiciones de clima seco y exposición a la luz solar.
ENS: ¿Y a la demanda interna?
LGMO: Colombia sigue produciendo varias veces lo que consume, es más, vemos con satisfacción que el consumo de café en Colombia, por muchos años estancado y dentro de los más bajos a nivel mundial, ha comenzado a dar señales de crecimiento gracias al programa de fomento al consumo apoyado por la industria cafetera nacional y la Federación.
ENS: ¿Continuarán las importaciones?
LGMO: En cuanto al abastecimiento nacional es importante tener en cuenta que una importante porción del consumo nacional se satisface a través de importaciones de café proveniente en su gran mayoría de Ecuador y Perú. Colombia evidentemente sigue produciendo varias veces lo que consume, pero lo que realmente sucede es que el café colombiano de alta calidad, por el cual se está pagando un mayor precio en los mercados internacionales, se exporta y genera así mayor valor agregado a los productores. Por ello, el volumen de importaciones no debe ser visto como algo negativo, ni mucho menos como una señal de desabastecimiento del mercado nacional.
ENS: ¿Cómo van las exportaciones?
LGMO: En el primer semestre, gracias al mayor volumen de producción, Colombia ha exportado a los mercados internacionales 4 millones 170 mil sacos, lo que significa 19 por ciento más que en igual período del año anterior.
ENS: ¿Qué se está haciendo para contrarrestar los efectos del invierno?
LGMO: Para contrarrestar los efectos de las lluvias en la producción cafetera, con el apoyo del Fondo Nacional de Calamidades, estamos ejecutando el Plan de Emergencia para la Ola Invernal a través del cual otorgamos apoyos para la fumigación y la fertilización a cerca de 200 mil cafeteros damnificados por el invierno. Esta población vio sus cultivos afectados por el hongo de la roya como consecuencia del exceso de humedad, lo cual tuvo un gran efecto en sus ingresos.
ENS: ¿Y para recuperar la capacidad productiva?
LGMO: Con miras a recuperar la capacidad productiva y los ingresos de esos productores, controlando la roya en los cafetales en edad óptima de producción sembrados en variedades susceptibles a este hongo, hemos desarrollado un agresivo programa que lanzamos a mediados del mes pasado y que en unas pocas semanas ha alcanzado a más del 25% de los damnificados.
ENS: ¿Cómo va la renovación de cafetales?
LGMO: Buscando inmunizar la caficultura colombiana de los efectos de la roya y en general de las consecuencias del cambio climático, la Federación de la mano del Ministerio de Agricultura, viene adelantando un ambicioso plan de renovación del parque cafetero mediante la siembra de variedades resistentes avaladas por Cenicafé para las plantaciones cuya edad supera los 8 años. De esa manera, buscamos salvaguardar la cosecha cafetera 2011 – 2012.
ENS: ¿Cuál es el aporte de los caficultores?
LGMO: La gente está adoptando los diferentes programas, y la capacidad productiva del país está comenzando a dar un vuelco. Vemos con satisfacción que la gente está invirtiendo en sus cafetales, sembrando variedades resistentes a la roya, preparándose para ser más productivos y eficientes.
ENS: ¿Cuáles son los desafíos?
LGMO: Evidentemente hay cosas que no podemos controlar, como el clima, pero los cafeteros le están apostando a sus fincas y sin duda esto se reflejará en las cifras de producción de los próximos años.
ENS: ¿Cuál es la meta?
LGMO: Las metas de renovación se están cumpliendo, la gente está adoptando los diferentes programas, y la capacidad productiva del país está comenzando a dar un vuelco. Es probable que pasemos de renovar 80 mil hectáreas en el 2010, alcanzando la meta de 130 mil en el 2011.
ENS: ¿Cuál es la visión del sector respecto al crecimiento del PIB agropecuario?
LGMO: Me parece muy positivo que el sector agropecuario haya crecido durante el primer semestre a una tasa de 7,8 por ciento, cifra no registrada por cerca de una década y que además demuestra que la locomotora agropecuaria arrancó y que ha sabido superar los efectos de las intensas lluvias.
ENS: ¿Cómo favorece al sector el crecimiento del PIB agropecuario?
LGMO: Para los cafeteros resulta muy significativo dicho comportamiento, puesto que el café aportó 3,6 puntos porcentuales, de los 7,8 por ciento que creció el agro colombiano en el primer trimestre de 2011. Lo que demuestra además que el café sigue siendo un producto tremendamente relevante para el campo colombiano y para la viabilidad y sostenibilidad de casi 600 municipios del país.
ENS: ¿Cómo será el comportamiento del sector?
LGMO: La producción cafetera del segundo semestre del año estará muy influenciada por las condiciones climáticas imperantes en el país ocho meses atrás, que es el tiempo que tardan en desarrollarse las cerezas de café después de la floración. Valga la pena señalar que para que los cafetales florezcan son necesarias condiciones de clima seco y exposición a la luz solar.
ENS: ¿Y la producción?
LGMO: Entre julio y septiembre, cuya cosecha corresponde a las floraciones de los meses de octubre a diciembre del año pasado, momento en el que se recrudeció la temporada invernal de 2010, esperamos que la cosecha sea menor a los promedios históricos registrados para esos meses. En cambio entre octubre y diciembre, cuya cosecha está relacionada con las florescencias de enero a marzo de 2011, se presentaron períodos secos que las favorecieron, motivo por el cual no declaramos optimistas acerca de los niveles de producción en los últimos meses del año.
ENS: ¿Cuál es la perspectiva?
LGMO: En los últimos meses del 2011 esperamos que la cosecha se comience a acercar a sus promedios históricos, y que el efecto combinado de todas estas circunstancias permita que la producción cafetera se encuentre en niveles similares a los observados 2010, es decir en un volumen que podrían incluso superar los 9 millones de sacos.