Tropas del Ejército lograron la ubicación y posterior destrucción de un cristalizadero, dotado con elementos de alta tecnología, dedicado a la producción de pasta base de coca perteneciente a la Organización Criminal de Los Chatas, localizado en el límite entre los municipios de Alejandría y San Rafael, oriente antioqueño.
Gracias a los trabajos de inteligencia realizados por la Cuarta Brigada del Ejército Nacional y a la colaboración de la población civil, uno de los cristalizaderos más grandes que se han hallado en los últimos cinco años, en todo el territorio del departamento de Antioquia, fue neutralizado luego de más de tres meses de reunir información que permitiera ubicar, en una zona boscosa de difícil acceso en el oriente antioqueño. Este complejo, compuesto por once construcciones rústicas, estaba dedicado a producir de manera tecnificada la pasta base de coca; y cuyo principal mercado era las calles de los municipios del Valle de Aburrá. El remanente de estos estupefacientes era comercializado con las Bandas Criminales al servicio del narcotráfico para ser enviado a Centroamérica y Norteamérica.
Gracias a la neutralización de este cristalizadero, que tenía la capacidad de producir un poco más de dos toneladas aproximadamente de pasta base de coca semanalmente, equivalente a 9500 millones de pesos cada mes, no solo se reduce la comercialización de estupefacientes en los sectores del Valle de Aburrá donde delinquen Los Chatas sino también su capacidad de financiar sus diferentes actividades delincuenciales. El hallazgo de este cristalizadero permitió la ubicación y posterior destrucción en total de 17633 kilos de insumos sólidos y de 8376 galones de insumos líquidos; y la incautación de 213 kilogramos de clorhidrato de cocaína y de 195 kilos de una sustancia que al parecer sería pasta base de coca.
En insumos se encontraron 7650 kilos de calcio clorhídrico, 6575 kilos de soda cáustica, 2625 kilos de bisulfito de sodio, 3981 galones de thinner, 3070 galones de alcoholes y similares, 795 galones de acetona, 395 galones de ácido sulfúrico, 350 kilos de carbón activado, 135 galones de gasolina, y 25 kilos de permanganato de potasio. A esto se le suma el hallazgo de dos transformadores, una caldera con los más altos estándares tecnológicos, cuatro canecas plásticas con capacidad para 2000 litros cada una, tres canecas con capacidad para mil litros, 13 canecas con capacidad para 500 litros cada una, 19 canecas para 55 galones cada una, 99 canecas para cinco galones cada una, diez canecas con capacidad para 10 litros cada una, tres canecas con capacidad de 25 galones, ocho mesas filtradoras para el procesamiento de pasta base de coca, dos motobombas, cinco estufas, un congelador, cinco pipetas de gas de 40 libras cada una, un equipo para soldadura, una máquina empacadora al vacío, cinco pacas de papel filtro, ocho hornos microondas, cuatro cajas con bolsas de látex, diez cajas con cinta adhesiva, dos prensas hidráulicas, tres moldes en acero, 54 recipientes con capacidad para 35 galones cada uno, dos decantadores, un gusano de aluminio con veinte cavidades para la producción de estupefacientes, y un marciano.
Los trabajos de inteligencia militar pudieron determinar además que quienes estaban realizando la producción de la pasta base de coca, en este cristalizadero en particular, habrían desarrollado su actividad ilegal previamente en funciones de extorsión, microtráfico y sicariato a órdenes de los máximos cabecillas de la Banda Criminal conocida como La oficina de Envigado.
Esta operación militar contó con el apoyo del Grupo Operativo de Investigación Criminal (Groic) de la Policía Nacional y de integrantes de la Policía Nacional y su componente de Antinarcóticos, quienes realizaron los actos urgentes y el proceso de judicialización del hallazgo y posterior neutralización de este cristalizadero.
En lo que va corrido del 2015, las unidades tácticas de la Cuarta Brigada, orgánica de la Séptima División del Ejército Nacional han logrado la ubicación y neutralización de 102 laboratorios y de dos cristalizaderos dedicados a la producción de pasta base de coca; de 12803 galones de insumos líquidos y de 35799,6 kilogramos de insumos sólidos destinados a la fabricación de estupefacientes, lo que contribuye a la consolidación de la seguridad y la tranquilidad de los 91 municipios que se encuentran bajo su jurisdicción. Esto se hace con el objetivo de llevar a cabo la misión constitucional que le ha sido encomendada en la carta magna por el pueblo colombiano.