Cae familia dedicada al microtráfico hace 34 años | El Nuevo Siglo
Martes, 25 de Noviembre de 2014

Un trabajo investigativo realizado desde hace 18 meses por la Policía Metropolitana de Bogotá en coordinación con la Fiscalía General, dejó al descubierto una familia que desde hace 34 años, se dedicaba al microtráfico en el sector del 7 de agosto (Localidad de Barrios Unidos), su fachada, ser vendedores y comercializadores de fruta y verduras en la plaza de mercado de la localidad.

 

 

Las investigaciones de inteligencia y policía judicial, que iniciaron en mayo de 2013, daban cuenta de unas mujeres siempre rodeadas por menores de edad, quienes desde costales de mazorcas y de toda clase de frutas y verduras, proveían un amplio mercado que les generaba utilidades diarias superiores a los 5 millones de pesos por la venta de marihuana y bazuco, principalmente.

 

Videos de seguimientos y actividades de controles técnicos, daban cuenta como estas mujeres ocultaban las dosis en costales, postes y aceras; un hombre conocido como alias ‘El Alemán’, cada 20 minutos en una bicicleta surtía a los vendedores, que en especial eran las sobrinas y los miembros más pequeños de la familia, haciendo de esto, una ‘zaga dedicada a una vida criminal’ heredada de los abuelos y quienes también tuvieron antecedentes por comercialización de estupefacientes.

 

Todos los miembros de la familia tienen más de 25 antecedentes judiciales por venta, tráfico y comercialización de estupefacientes. Alias ‘El Alemán’, Cristian Bauer Vega, de padre germano, puso a disposición de la organización un local comercial propiedad de sus padres para utilizarlo como lugar de acopio de los estupefacientes para evitar los controles policiales en las requisas de las personas que actuaban como ‘jibaros’

 

María Eulogia Cuestas Mora, la mayor de la familia, había sido condenada hace un año por tráfico de estupefacientes, sin embargo, desde inmediaciones de la plaza de mercado dirigía y controlaba el negocio. Alias ‘Eulogia’ tenía una casa de mas de 700 metros cuadrados en el Barrio Suba Rincón, dotada de toda clase de electrodomésticos y muebles en donde recibía en fastuosas fiestas semanales a todos los miembros de la familia quienes también eran sus socios y empleados en el ilegal negocio que daba ganancias superiores e los 150 millones de pesos mensuales.

 

Alias el Alemán y Flor María Castro fueron los únicos capturados que no hacían parte de la familia Cuestas Mora, a quienes un juez de la República les dictó medida de aseguramiento por los delitos concierto para delinquir y  porte tráfico y comercialización de estupefacientes agravado en la medida que utilizaban menores de edad para sus actividades ilícitas.