Luego de 48 denuncias fue capturada una banda de 12 personas que se dedicaba a robar vehículos en diferentes sectores de la capital. En muchos casos, cuando las víctimas se resistían al hurto, eran atacadas con un ‘tábano’, aparato que expulsa choques eléctricos y reduce la capacidad de reacción en el ser humano.

Con estas denuncias y las coincidencias en el ‘modus operandi’, la Policía Metropolitana de Bogotá inició un proceso investigativo con el objetivo de conocer e individualizar a los miembros de esta peligrosa estructura delincuencial. Se pudo establecer al poco tiempo, que eran 12 los miembros de la banda que actuaba como organización, pues cada uno de los integrantes tenía roles y responsabilidades en momentos previos al hurto, durante la comisión de este y luego cuando se comercializaban las autopartes en mercados clandestinos de Bogotá y ciudades circunvecinas.

Testimonios entregados por algunas de sus víctimas, daban cuenta que eran asaltados por dos o tres hombres en momentos que se disponían a guardar el vehículo en garajes. Muchas víctimas afirmaron que fueron golpeadas e incluso atacadas con ‘tábanos’ para neutralizarlos. Otra forma de realizar los hurtos, era abrir los automotores con ‘ganzúas’ o ‘pinzas’ que en cuestión de 20 a 30 segundos les permitía hurtar automotores cuyos repuestos y partes fueran apetecidas en los mercados clandestinos de la ciudad.

De acuerdo con las investigaciones realizadas por la Policía Nacional, estos sujetos responden hasta el momento por 48 hurtos materializados a automotores avaluados en más de mil cien millones de pesos, pero las investigaciones preliminares dan cuenta de más de 300 hurtos a vehículos que superarían los 5 mil millones de pesos en las localidades de Kennedy, Bosa, Puente Aranda, Usaquén, Suba y los municipios de Facatativá, Funza y Mosquera.

Un trabajo investigativo desarrollado por más de 6 meses y que contó con el apoyo y coordinación de la Fiscalía 35 Local de la ciudad, permitió que luego de 11 diligencias de allanamiento, se diera captura a los 12 integrantes de esta peligrosa banda, de la cual su jefe, Michael Velazco, tenía antecedentes por hurto agravado y calificado. En estas diligencias se pudieron recuperar dos automotores y se incautaron tres armas de fuego así como también teléfonos celulares de alta gama, utilizados por estos criminales para planear sus ‘actividades’ y realizar las ventas a terceros de los automotores o sus partes.