La búsqueda de más de 100 alumnas de una escuela secundaria nigeriana secuestradas por el grupo islamista Boko Haram seguía este miércoles en la ciudad Chibok, en el noreste del país.
Un grupo de hombres armados entró al anochecer en esa escuela pública. Tras matar a un policía y a un soldado que protegían el edificio hicieron subir a las adolescentes en camiones y se internaron en el monte de esta remota región.
"Los militares están peinando el bosque para rescatar a las niñas. Están apoyados por helicópteros" dijo el senador Alí Ndume, representante del estado de Borno, el más afectado por la violencia de los insurgentes islamistas.
Explicó que la búsqueda es difícil porque "se trata de un gran bosque que se extiende hasta el vecino Camerún".
Una fuente de los servicios de seguridad afirmó que el ejército había encontrado rastros de neumáticos y estaba siguiéndolos.
El movimiento islamista Boko Haram, cuyo nombre significa "La educación occidental es pecado", ha atacado escuelas y universidades en varias ocasiones y sus acciones han dejado miles de muertes desde 2009, cuando empezó su revuelta.
El secuestro en Chibok coincidió con la explosión de una bomba el martes en una estación de autobuses en las afueras de Abuya, la capital del país, que dejó 75 muertos, un ataque atribuido a Boko Haram.
"Se llevaron a mi hija. No sé qué hacer. Las autoridades no deberían permitir que estos asesinos hagan pedazos los sueños de nuestras hijas", dijo una mujer de Chibok, que como muchos de los padres de las niñas secuestradas no quiso identificarse.
Algunas de las niñas lograron escapar cuando los islamistas estaban reparando uno de los camiones, explicó a la AFP una niña que logró huir.
"Toda la ciudad está de luto", dijo el padre de otra de las secuestradas, que dijo estar viviendo "una pesadilla".