“El objetivo de esa intervención debe ser la persona, el habitante de la calle, su rehabilitación, el generar una política pública que permita esa rehabilitación. El otro tema es policivo. La autoridad no puede permitir que un centro tan importante como el denominado ‘Bronx’ se convierta en un santuario de la delincuencia”, aseguró hoy el procurador general de la Nación, Alejandro Ordóñez Maldonado, en referencia a la acción policial e institucional emprendida por la administración de Bogotá en contra de las fuentes y actores de criminalidad en la zona denominada “Bronx”, en la capital colombiana.
Destacando que “el señor alcalde (Enrique Peñalosa) debe tener todo el respaldo de la institucionalidad”, el jefe del Ministerio Público aseguró que los hechos conocidos en las últimas horas demuestran una vez más el “fracaso de la política alternativa en materia de consumo de drogas” y la incoherencia de un Estado que persigue a los habitantes de la calle como elementos del microtráfico, pero desmonta la política pública en contra de los cultivos ilícitos.
“Hay una incoherencia del Estado porque los habitantes de la calle son un instrumento del microtráfico y el Estado, con la renuncia a combatir los cultivos ilícitos, abocó a la sociedad al fortalecimiento inusitado del microtráfico”, explicó.
Preguntado por periodistas sobre el acto legislativo de Senado y Cámara de Representantes que podría dar poder constitucional a los acuerdos de La Habana (Cuba), el jefe del órgano de control reiteró los riesgos de quebrar el orden interno colombiano.
“Las funciones de constituyente, el Congreso se las termina trasladando al señor presidente y a las FARC, para que ellos escriban la Constitución que quieran. Eso se convierte en acuerdo especial que ingresa al bloque de constitucionalidad. El Congreso queda con una función notarial y el presidente y las FARC con una función constituyente. Esa es la realidad del rompimiento de nuestro ordenamiento constitucional. Sería la única Constitución en el mundo que podría tener un artículo en blanco para que FARC y presidente lo llenen como se les venga en gana”.
Igualmente se pronunció en referencia al mecanismo idóneo para la refrendación popular de un eventual acuerdo definitivo entre Ejecutivo y subversión.
“Lo que establece la Constitución es el referendo, porque el plebiscito es absolutamente inane, ineficaz, si se quiere eunuco, porque el ciudadano votará pero no decidirá. Votar mediante la forma plebiscitaria es impertinente e inadecuado, no es el instrumento para modificar la Constitución”
Las declaraciones del procurador general de la Nación se dieron en la ciudad de Bogotá en desarrollo del evento de presentación de cartillas de fortalecimiento territorial, del que hicieron parte la Organización de Estados Iberoamericanos, el Ministerio de Vivienda, la Unidad Nacional para la Prevención del Riesgo de Desastres, la Federación Nacional de Municipios y la Dirección Nacional de Bomberos.