La presidenta de Brasil y candidata a la reelección Dilma Rousseff previó una mejora de los indicadores económicos del segundo semestre, destacando una caída en la inflación.
"Tenemos una mejora prevista en el segundo semestre en relación al primero", dijo Rousseff en una entrevista, en calidad de candidata, a la televisión Globo.
Brasil atraviesa el cuarto año consecutivo de crecimiento moderado. Tras un alza de 7,5% del PIB en 2010, la economía creció 2,7% en 2011, 1% en 2012 y 2,5% en 2013. Para el 2014, analistas esperan una expansión por debajo de 1%.
La inflación por su parte se ubicó en junio 6,52% a 12 meses, superando el techo de la meta oficial del Banco Central de 6,5%, aunque la mandataria celebró que el indicador "cae desde abril" y ahora llega "sin ver el retrovisor" -- o sea, sin tomar en cuenta el acumulado del año -- "al cero por ciento".
"Estamos superando las dificultades de enfrentar una crisis sin despedir, generando empleo y renta", dijo.
Rousseff, que lidera las encuestas de intención de voto con 36%, explicó que su primer gobierno sirvió "para dar avance a los proyectos del gobierno Lula (Luiz Inacio Lula da Silva)", su antecesor y padrino político, durante el cual millones de brasileños salieron de la pobreza.
"Preparamos a Brasil un nuevo ciclo de crecimiento: un Brasil moderno, más inclusivo, más productivo, más competitivo. Creamos las condiciones para que el país dé un salto, colocando la educación como centro de todo, y eso significa que queremos continuar siendo un país de clase media, con cada vez mayor participación de la clase media", señaló.