Brasil está perdiendo soldados como en una guerra, y su general Dunga apela a las últimas reservas para no mostrar la bandera blanca al frente de una selección que además va a la Copa América Centenario sin su conductor, el capitán Neymar.
La mala suerte parece perseguir a la selección pentacampeona del mundo, que a horas de debutar en el torneo continental ha sufrido ya seis bajas, algunas de ellas claves para su accionar, lo que ofrece muchas dudas acerca de sus posibilidades y pone en la picota el trabajo de técnico Dunga.
La última pérdida fue el volante defensivo Luiz Gustavo, del Wolfsburgo de Alemania, quien se bajó del torneo este jueves por "problemas personales". En su lugar fue citado Wallace, del Gremio de Porto Alegre.
"Luego de discutirlo con el comando técnico de la selección, el jugador del Wolfsburgo (Alemania) pidió ser liberado del grupo debido a problemas personales", informó la CBF en un comunicado este jueves.
Previamente se había caído el veterano mediocampista Kaká, desconvocado el miércoles al sufrir una lesión muscular a dos días del arranque del torneo, que conmemora sus 100 años.
El primero en desertar fue Ricardo Oliveira, sustituido por Jonas, el goleador del campeonato portugués en el Benfica. Antes, el propio Kaká había sustituido a Douglas Costa y, el martes, el portero Ederson y el mediocampista Rafinha también fueron cortados por la misma razón, y entraron en sus puestos Marcelo Grohe y Lucas Moura, respectivamente.
Según comunicó Gilmar Rinaldi, coordinador de selecciones de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), Paulo Henrique Ganso, volante ofensivo del Sao Paulo, será llamado para reemplazar a Kaká.
- Brasil desdibujado -
Todas estas ausencias han desdibujado un tanto el equipo que tenía en mente Dunga para resarcir en este torneo el mal desempeño de Brasil en las eliminatorias de la Conmebol, en las que marcha sexto, con 9 puntos en seis partidos, fuera de la zona de clasificación para el Mundial de Rusia-2018.
Contratado nueve días después de la humillante actuación de Brasil en el Mundial-2014 realizado en su patio, Dunga se la juega aquí con una nueva generación de jugadores y apenas tres supervivientes del desastre del Mundial.
"Tenemos jugadores que han mostrado capacidad para convertirse en referentes en la selección", dijo Dunga en una rueda de prensa el pasado lunes en Los Angeles.
Una de las bajas más sensibles es la de Rafinha Alcántara, volante del Barcelona de 23 años, uno de los primeros en irse debido a persistentes dolores en la rodilla derecha.
Luego de meses de recuperación debido a una rotura de ligamento cruzado anterior de la rodilla, el hermano de Thiago Alcántara recibió con alegría su primera convocatoria con la selección absoluta, pero según los médicos del equipo los constantes dolores musculares frenaron su entrenamiento.
El médico de la selección, Rodrigo Lasmar, explicó a la prensa que el jugador había llegado a la Seleçao con unos dolores musculares.
"Hicimos trabajo regenerativo y después una resonancia magnética que demostró que el jugador tiene una pequeña lesión", afirmó Lasmar.
El arquero del Benfica, Ederson, también se lesionó durante un entrenamiento en Los Angeles y cedió su puesto como tercer portero a Marcelo Grohe, del Gremio. El titular de la posición es Alisson y el segundo Diego Alves.
A estas ausencias se suma la del capitán y bujía del seleccionado, Neymar, que sólo fue autorizado por el Barça a disputar los Juegos Olímpicos de Rio de Janeiro-2016.
- Buen plantel -
Aún con las bajas, Dunga cuenta con un núcleo de excelentes jugadores capaces de darle a Brasil su novena Copa América.
La plantilla auriverde tiene nombres de lujo como Casemiro, Filipe Luis, Dani Alves y Hulk, suficientes para tratar de compensar la ausencia de Neymar y el resto de lesionados.
Otra buena noticia para Dunga es que Dani Alves, quien llegó desde Barcelona con problemas en un pie, parece recuperado para disputar el torneo y fue titular en la victoria 2-0 en el amistoso contra Panamá del domingo.
La nueva revelación brasileña se llama Carlos Henrique Casemiro, conocido sólo por Casemiro, el centrocampista que viene de consagrarse con el Real Madrid al ganar por segunda vez en su carrera la Champions League.
El futbolista nacido en el estado de Sao Paulo espera acabar de convencer a Dunga, luego de un gris paso por la Copa América de Chile el año pasado, donde fue suplente y no disputó ni un solo minuto. Desde entonces no había regresado a la 'Seleçao'.