La ciudad de Boston (Massachusetts, noreste) renunció a la candidatura para organizar los Juegos Olímpicos de verano de 2024, confirmó este lunes el Comité Olímpico de Estados Unidos (USOC por su sigla en inglés).

El jefe ejecutivo del USOC, Scott Blackmun, y el líder de la candidatura de Boston-2024, Steve Pagliuca, anunciaron la decisión en un comunicado conjunto.

La decisión se produjo después de que varios altos funcionarios públicos se negaran a dar pleno respaldo a la oferta citando preocupaciones sobre las finanzas.

"No hemos sido capaces de obtener una mayoría entre los ciudadanos de Boston para apoyar la celebración de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de 2024", dijo Blackmun.

"Por lo tanto, el USOC no cree que el nivel de apoyo del que goza la oferta de Boston le permita prevalecer sobre las grandes ofertas de París, Roma, Hamburgo, Budapest o Toronto", añadió.

Boston había sido nombrada como candidata en enero, derrotando a las candidaturas de ciudades como Washington, Los Ángeles y San Francisco.

La declaración de USOC dijo que "estudiará si otra ciudad estadounidense alternativa es elegida para 2024, con el objetivo de tomar una decisión más adelante en agosto", agrega el comunicado.

Estados Unidos no ha sido anfitrión de los Juegos Olímpicos de Verano desde Atlanta-1996 y no ha sido sede de los Juegos Olímpicos de Invierno desde Salt Lake City-2002.

No obstante, Blackmun señaló que "al USOC le gustaría mucho ver una ciudad estadounidense sede de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de 2024".

"Vamos a comenzar inmediatamente a explorar si podemos hacerlo de forma coherente con nuestros principios rectores, a los que seguimos firmemente comprometidos. Somos conscientes de la realidad de la línea de tiempo que está delante de nosotros", subrayó Blackmun, quien agregó que no tendría ningún comentario sobre el asunto antes del próximo mes.

Mientras tanto el alcalde de Boston, Marty Walsh, dijo que valía la pena echar a pique la candidatura olímpica para asegurar la responsabilidad financiera.

"Creo firmemente que traer los Juegos Olímpicos de regreso a Estados Unidos sería bueno para nuestro país y habría traído beneficios a largo plazo a Boston", dijo Walsh.

"Sin embargo, ningún beneficio es tan grande como para que valga la pena entregar el futuro financiero de nuestra ciudad", agregó Walsh.

Walsh añadió: "Esperábamos tener el tiempo necesario para llevar a cabo las diligencias debidas de las garantías requeridas y una revisión completa del riesgo. Esta es una decisión monumental que no puede ser apresurada, aunque signifique no seguir adelante con nuestra candidatura para los Juegos de 2024 de verano".

Por su parte, Pagliuca, el co-propietario de los Boston Celtics de la NBA, se unió a la oferta de Boston y ayudó a impulsar una nueva visión para vender a los ciudadanos la candidatura. Pero la idea nunca recibió el apoyo necesario.

"Creemos que los beneficios de la organización de los Juegos son muy superiores a los riesgos. Con más tiempo para participar en una discusión .... creemos que el apoyo público crecería", agregó Pagliuca/AFP.