Al menos 45 personas, entre ellas civiles, murieron en bombardeos aéreos rusos en el norte de la provincia de Latakia, un bastión del régimen sirio en el oeste del país, afirmó este martes una ONG.
Todas ellas murieron el lunes en ataques aéreos contra la zona de Jabal Akrad, feudo de los insurgentes moderados y de los islamistas en esta provincia que se halla mayoritariamente bajo control del régimen, informó el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).
"La mayoría de los muertos son rebeldes pero entre las víctimas figuran civiles", añadió el OSDH, que también da cuenta de decenas de heridos.
La ONG no ha precisado el número de civiles muertos, entre ellos algunos familiares de los insurgentes.
Rusia, aliada del régimen de Bashar al Asad, afirma desde el comienzo de su intervención militar en Siria el 30 septiembre que sus operaciones van dirigidas contra el grupo yihadista Estado Islámico y otras organizaciones "terroristas" hostiles al poder.