Recurrir a la fuerza contra buques cargados de migrantes en el Mediterráneo "no es una solución", afirmó el presidente de la Cruz Roja italiana en momentos en que el Consejo de Seguridad evalúa autorizar operativos europeos contra los traficantes de personas.
"No soy necio, hay que combatir a los traficantes y a los barqueros", reconoció Francesco Rocca. "Pero para nosotros, bombardear buques no es una solución porque los traficantes encontrarán otras rutas".
Rocca señaló que el tráfico de migrantes hacia Europa ya pasaba por Turquía o los Balcanes.
"Se necesita un acercamiento global" que combine una solución política en Libia, para que un gobierno unitario pueda oponerse al tráfico, con una acción humanitaria, señaló.
Rocca, quien también es vicepresidente de la Federación internacional de Sociedades de la Cruz Roja, habló con la prensa después de reunirse con el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.
Esta visita se realizó unos días antes de una reunión el lunes del Consejo de Seguridad sobre el drama de los migrantes en el Mediterráneo a la cual participará la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini.
La Unión Europea busca obtener el aval de la ONU para intervenir, incluso a la fuerza, contra las redes de traficantes que atraen a migrantes que arriesgan su vida en busca de asilo y les hacen cruzar el mar Mediterráneo desde Libia.
Francia, el Reino Unido, España, Lituania e Italia elaboran un proyecto de resolución que daría mayor legitimidad internacional a los operativos europeos para controlar barcos de migrantes, en particular en aguas internacionales.
Según un diplomático de la ONU, la resolución también permitiría llevar a cabo operativos contra traficantes en tierras libias, para lo cual necesitarán contar con el aval de los dos gobiernos y de los dos Parlamentos que tiene Libia actualmente.
La resolución autorizaría a la UE "tomar barcos si se hallan pruebas de que podrían ser usados" por traficantes de personas, explicó el diplomático, quien minimizó las reticencias de Rusia ante una intervención de este tipo de la ONU, siempre y cuando no implique la destrucción de los buques.
Los europeos esperan que el texto se apruebe en el Consejo antes del 18 de mayo, fecha en que se reunirán los ministros de asuntos exteriores de la UE.
Más de 1.500 personas murieron en lo que va de 2015 intentando cruzar el Mediterráneo, contra menos de un centenar en el mismo lapso de 2014/AFP.