Bogotá calma el hambre | El Nuevo Siglo
Domingo, 5 de Abril de 2015

Colombia y los 189 países miembros de las Naciones Unidas se comprometieron a cumplir una serie de metas para lograr un mayor desarrollo mundial. En la segunda parte del primer Objetivo de Desarrollo del Milenio: Erradicar la pobreza extrema y el hambre, Bogotá va bien, pero aún le hace falta ¿En qué se está trabajando? ¿Qué se ha logrado? ¿Cuánto falta para cumplir la meta? Segundo informe

 

Por: Orlando Pinzón

Periodista de El Nuevo Siglo

 

Si bien en materia de reducción de la pobreza, mirado con los estándares internacionales aceptados, tanto el país como su capital van por buen camino, todavía hace falta cumplir a cabalidad la segunda parte del primer Objetivo de Desarrollo del Milenio: el que tiene que ver con el hambre.

La meta universal de acuerdo con las Naciones Unidas es reducir a la mitad, entre 1990 y 2015, el porcentaje de personas que padezcan hambre. El tópico para Colombia se partió en dos: por un lado que se disminuyera de 10% a 3% el número de niños menores de 5 años con peso inferior al normal y por el otro lado reducir de 17 a 7,5% las personas que están por debajo del consumo de energía mínima  alimentaria.

Para el organismo internacional, citando a Bickel, desde la óptica de los derechos humanos el objetivo de la lucha contra el hambre es lograr una alimentación adecuada para cada persona. No se trata sólo del hambre como la sensación de desasosiego causada por la carencia de alimento. El hambre crónica produce la desnutrición o malnutrición.

¿Qué se ha logrado?

De acuerdo con el subsecretario de Salud Pública, Jaime Urrego, quien habló con EL NUEVO SIGLO sobre este tema “un indicador significativo en cualquier territorio local o nacional es la disminución de la mortalidad por desnutrición que durante dos años consecutivos (2012-2013) se ubica en cero, digamos que el estándar debe estar por debajo de 1,5% por 100 mil y Bogotá ha logrado mantener cero mortalidad por desnutrición”.

Para Urrego Rodríguez “ya cuando el niño ha sobrevivido a un problema que básicamente es de hambre y enfermedad, estamos luchando en Bogotá y en todo el país para disminuir la desnutrición global que es la que mide la relación de peso con la edad. En este caso nos ubicamos para el 2014 en el 5% con lo cual 11.570 niños menos padecieron este problema de desnutrición global durante 2014, y en todo caso estamos pendientes de seguir avanzando durante el 2015 para seguir bajando la desnutrición global al 3%”.

De igual forma, el funcionario distrital explicó que “en relación con la desnutrición crónica que nos mide la relación de la talla con la edad, Bogotá tiene una tendencia de disminución y durante 2014, 25.210 niños menos padecieron de esta problemática”.

Agregó que “un indicador muy importante que es el bajo peso al nacer, que depende que una gran cantidad de factores sobre todo de lo que significa la salud de la madre durante el periodo gestacional, ha disminuido al 12,3%, debe llegar al 10% y hay que señalar de manera importante que con  el liderazgo de Integración Social  y Secretaría de Educación, hay una meta de atender integralmente 270.000 niños por año, la cual ha sido superada en términos de alimentación y de cuidado integral, eso ya se superó en un 100% de la meta”.

Urrego contó que como medida complementaria “la Secretaría de Salud avanza en un programa de fortificación con micronutrientes dirigido a 140.000 niños ubicados en familia con pobreza extrema, de esta manera digamos: si bien todavía tenemos un trecho por recorrer y hay una brecha que hay que superar para mejorar más esos indicadores, lo que puedo decir es que la tendencia es al mejoramiento y quedan pendientes los programas de alimentación y de territorios saludables, que permiten hacer una estrategia muy fuerte en promoción y prevención con las familias que producen progresivamente los resultados, no es de un día para otro y nosotros consideramos que a partir de este año 2015 y 2016, se va a poder ver con mayor impacto, aunque hoy ya lo tenemos, el resultado de estos esfuerzos que contribuyen a disminuir la pobreza extrema, que es uno de los indicadores de los Objetivos de Desarrollo del Milenio”.

Logros

Son varios los programas y proyectos que la Administración Distrital ha adelantado con miras al cumplimiento de los Objetivos del Milenio, buscando el bienestar de los capitalinos, según el Plan de Desarrollo Bogotá Humana y la Política Pública de Seguridad Alimentaria y Nutricional. 

En diálogo con este diario, la subdirectora para la Gestión Integral Local, Adriana Piraquive, explicó que “durante el gobierno de la Bogotá Humana con corte diciembre de 2014 a través del Proyecto 730 alimentando capacidades: se han atendido 353.569 personas con apoyos alimentarios en los diferentes servicios sociales de la SDIS, estos apoyos alimentarios aportan entre el 35% y el 100% del valor calórico total recomendado para la población colombiana por día”.

Piraquive señaló que “el gobierno de la Bogotá Humana ha entregado a 30 de noviembre de 2014 apoyos alimentarios a 118.444 personas más que las atendidas en el 2011” y que “la atención se ha centrado en atender a las personas en mayor situación de pobreza e inseguridad alimentaria, por lo tanto las localidades con mayores coberturas de atención son Ciudad Bolívar con el 16,50%, Usme con el 10,43%, San Cristóbal 10,14%, Bosa 9,31% y Kennedy 8,36%”.

En lo que tiene que ver con los comedores comunitarios-centros de referencia y desarrollo de capacidades, “se han atendido 80.565 personas promedio cada año, aportando a  superar sus condiciones de inseguridad alimentaria y nutricional mediante el acceso a alimentos adecuados e inocuos, centrando la atención en la inclusión de niños y niñas con un 69,68% del total de personas atendidas y logrando que el 62% de estos niños y niñas a quienes se les realizó vigilancia nutricional entre los 5 y 12 años recuperaran su estado nutricional”.

Es así como en 2014, ningún niño o niña murió de hambre o desnutrición, según el informe de rendición de cuentas 2014 presentado por el alcalde Mayor, Gustavo Petro y el sistema de estadísticas vitales de la Secretaría Distrital de Salud.

Tres ejes

La Subdirectora para la Gestión Integral Social explicó las modalidades del Proyecto 730, el cual cuenta con el servicio Mi Vital alimentario del que se desprenden tres modalidades de atención: Comedores Comunitarios CRDC, Canastas Complementarias de Alimentos y Bonos Canjeables por Alimentos.  Además, el proyecto 730 cuenta con un componente transversal que se divide en capacitación, vigilancia nutricional y suministro de alimentos.

En cuanto a los comedores comunitarios, estos son concebidos como  espacios físicos, sociales y comunitarios de coordinación y articulación transectorial donde se orientan y desarrollan procesos de fortalecimiento de capacidades y  se suministra un almuerzo en condiciones adecuadas e inocuas, con un aporte nutricional del 40% del valor calórico total de las recomendaciones de consumo diario de calorías y nutrientes para la población colombiana.

A la fecha, el Proyecto 730 cuenta con 147 comedores comunitarios en 19 localidades de la ciudad a excepción de Sumapaz, en los cuales se suministra una alimentación servida a 51.305 cupos, equivalentes a 80.565 personas a 31 de diciembre de 2014.

En lo que respecta a las canastas complementarias de alimentos, se trata de la entrega mensual de alimentos a grupos familiares residentes en territorios o poblaciones con características diferenciales, en las submodalidades: indígenas, afro, rural y en zonas sin condiciones higiénico-sanitarias -SCHS-, con un aporte nutricional entre el  35% al 40% del valor calórico total, de acuerdo a la recomendación diaria de calorías y nutrientes para la población colombiana.  Esta modalidad ha suministrado alimentos a 26.344 cupos, equivalentes a 33.121 personas a 31 de diciembre de 2014.

Los bonos canjeables por alimentos, una innovadora apuesta de la Administración Distrital, consiste en la selección autónoma de alimentos en puntos autorizados, por parte de las familias, de acuerdo a sus preferencias, hábitos y costumbres, con base en una lista de grupos de alimentos y con un valor canjeable de acuerdo al número de integrantes en atención de la familia. La modalidad de atención tiene como fin aportar entre el 35% al 40% del valor calórico total diario recomendado, y contempla realizar vigilancia y seguimiento nutricional y promoción en estilos de vida saludable.  

Actualmente, la SDIS para la prestación de dicha modalidad, tiene en ejecución tres operaciones a través de la Bolsa Mercantil de Colombia, cuyo proveedor es el Consorcio Colsubsidio-Cencosud 2014; un Convenio con la Secretaría de Desarrollo Económico y la Cooperativa Cooratiendas; y un contrato con la Unión Temporal Bonos 2014 para la operación de dicha modalidad. A diciembre de 2014 se suministraron alimentos a 87.804 cupos, equivalentes a 152.756 personas a 31 de diciembre de 2014.