Por corrupción de testigos en el caso llamado Mills, la Fiscalía de Milán pidió esa condena para el ex premier italiano

"Tenemos la seguridad, más allá de toda duda razonable, de que el acusado es culpable", afirmó el fiscal Fabio De Pasquale.

El multimillonario político, Silvio Berlusconi, al centro de numerosos líos judiciales, es acusado de haber pagado 600.000 dólares al influyente abogado británico David Mills para que testificara a su favor en la década de los 90 en varios juicios contra él.

De Pasquale citó como prueba de culpabilidad la sentencia de febrero del 2010 de la Corte de Casación, la mayor instancia legal italiana, que si bien establecía que el abogado era culpable, consideraba que el delito había prescrito y anuló la condena a 4 años y medio para Mills.

El abogado británico fue procesado por separado y condenado tanto en el primer como en el segundo juicio por falsos testimonios.

La Corte de Casación reconoció que se trató de un "caso de corrupción muy grave" y confirmó indirectamente que Berlusconi había corrompido a su ex abogado David Mills.

Tras el pedido del fiscal, los abogados de la defensa tomarán la palabra para su requisitoria.

Muchos asuntos siguen pendientes en el proceso, cuyo delito está por prescribir en los próximos meses.

La defensa de Berlusconi recusó en enero al tribunal de Milán, al que acusa de haber eliminado numerosos testigos a su favor para evitar la prescripción y de haber pronunciado "anticipadamente" el veredicto de culpabilidad, mucho antes de que terminara el proceso.

"Este es un tribunal imparcial", lanzó uno de los abogados estrellas de Berlusconi, Niccolo Ghedini.

El pedido de recusación será examinado el 18 de febrero por la Corte de Apelación y hasta entonces los jueces no podrán pronunciar su sentencia.

La próxima audiencia del juicio fue fijada para el 25 de febrero.

Una verdadera batalla legal se adelanta por la prescripción del delito.

Según la defensa, el delito prescribió en un lapso de tiempo que va del 8 de enero al 9 de febrero, mientras que para el tribunal deberá prescribir entre el 3 de mayo y mediados de julio, según su contabilidad.

La fecha de la prescripción definitiva será fijada por la Corte de Apelaciones durante una reunión especial./AFP