“Rezo por la inmediata liberación de la niña y de todas las personas que están secuestradas en Colombia por grupos terroristas y delincuentes despiadados” aseguró el sumo pontífice.
Desde el momento que conoció la devastadora noticia, el Papa declaró que ora por “la liberación de todos los secuestrados, para que sus vidas sean respetadas y vuelvan inmediatamente con sus familias y por la conversión de quienes cometen estos crímenes”.
Por su parte, el presidente Juan Manuel Santos pidió apoyo a Venezuela para evitar que la hija del alcalde de Fortul, sea trasladada a ese país.
"Ya se habló con las autoridades venezolanas para que no permitieran que se la lleven al lado venezolano", dijo el mandatario en declaraciones formuladas en San Andrés.
La menor, hija del alcalde de Fortul, Jorge Muñoz, fue secuestrada el jueves en la mañana cuando se dirigía al colegio en compañía de su mamá, quien poco después fue dejada en libertad.
En sus declaraciones de este sábado Santos dijo que habló con el comandante del Grupo Antisecuestro de la Policía, general Humberto Guatibonza, quien le expresó su confianza por el pronto rescate de la niña.
"Acabo de hablar con el general Guatibonza, me dice: 'Tenga fe Presidente porque a esta niña la vamos a rescatar", precisó el mandatario.
Desde el momento del secuestro, el Ejército y la Policía realizan intensas operaciones en la zona para dar con el paradero de la menor, y el gobierno ofreció una recompensa de 100 millones de pesos (52.000 dólares) por información que permita su ubicación.
Aunque en un principio la policía dijo no conocer las identidades de los plagiadores o el grupo al que pertenecen, el viernes el general Jaime Reyes, comandante del Ejército en la región, dijo a periodistas que "estas personas que secuestraron a la niña manifestaron ser de las Farc".
El departamento de Arauca, donde se localiza Fortul, es una de las más importantes zonas petroleras de Colombia, con activa presencia de las Farc y el Eln. Los dos grupos mantienen desde hace varios años una confrontación por el control del territorio.
AFP