El Papa Benedicto XVI en su misión apostólica insta al mundo a la convivencia. Desde su sede en el Vaticano continuamente hace llamados para que se depongan los odios y reine la armonía universal. Hace unos días se refirió a Colombia, sobre la búsqueda de solución negociada al conflicto de varias décadas, expresó su respaldo e hizo votos por el éxito de los diálogos.
El Papa siempre está atento a lo que ocurre en cualquier lugar del planeta. En visita al Líbano, la primera a ese país, donde se han acentuado las tensiones, luego de la difusión de un filme hecho en EE.UU. donde se hace mofa de Mahoma, el máximo jerarca de la Iglesia Católica ha rechazado de manera enérgica la violencia desatada por grupos musulmanes contra sedes diplomáticas norteamericanas en varios países árabes. Pidió también al cese de envío de armas a Siria. Explica el Pontífice que sin esas armas ‘la guerra no podría continuar’. Manifestó su solidaridad con los 15 millones de cristianos que residen en 17 naciones de Oriente Medio. Sobre la Primavera Árabe dijo que el grito de libertad es positivo, sin embargo, advirtió del riesgo de que se olvide la tolerancia hacia el otro.