Barcelona de Guayaquil tiene un palmarés mucho más modesto que su rival en semifinales de la Copa Libertadores-2017, el bicampeón Gremio. Pero este miércoles, en la ida, cuenta con un aval: haber liquidado a tres grandes brasileños en el torneo.
Tras vencer a Botafogo en la fase de grupos, a Palmeiras en octavos y a Santos en cuartos, los 'toreros' del DT uruguayo Guillermo Almada buscan ahora consolidar su hazaña, meterse en su tercera final de la máxima competición continental (las dos anteriores, en 1990 y en 1998, terminaron en derrota).
"Respetando la magnitud del rival que tenemos al frente, no nos creemos más que nadie ni menos tampoco", explicó Almada en una entrevista con la AFP.
El uruguayo, que se hizo con las riendas del equipo en 2015 y consiguió el campeonato local en 2016, afronta el encuentro con tres importantes bajas: el delantero Jonathan Álvez, máximo goleador barcelonista en la Libertadores con 5 tantos, y el mediocampista Gabriel Marques, ambos suspendidos, y el delantero Tito Valencia, por lesión.
"Barcelona tiene un partido bien complicado. En casa, sus rivales le cubren muy bien sus espacios y les tapan muy bien los laterales, como Caicedo y Ayoví, y eso les dificulta mucho la llegada", explica a la AFP el analista deportivo, exjugador y exentrenador Polo Carrera.
Agregó que la ausencia de Álvez y de que "va a enfrentar a un rival que ha guardado a todos sus jugadores para el miércoles" lo complica todo más para el equipo más popular del balompié ecuatoriano, que carece de coronas internacionales.
"Planteamiento defensivo"
Desde el domingo en Guayaquil, el 'inmortal tricolor', campeón de la Libertadores (1983 y 1995), de la Intercontinental (1983) y de la Recopa Sudamericana (1996), afronta con modestia el encuentro.
Aunque los volantes Luan y Michel no están recuperados al 100%, el DT Renato Portaluppi cuenta en la punta con el paraguayo Lucas Barrios, con seis goles en el certamen regional.
Entre sus jugadores está un exbarcelonista, el volante ofensivo Michael Arroyo, que el lunes afirmó que está "muy motivado" para enfrentar a su exequipo, que pasa por un "gran momento" en la competición (aunque con un rendimiento pobre en el campeonato local).
Gremio, que viene de perder en casa ante Palmeiras en la liga brasileña, tiene "un poder ofensivo y un arquero fuerte (Marcelo Grohe)", advirtió Carrera.
"Acá en Guayaquil, tendrá un planteamiento defensivo para sacar un buen resultado de cara a la vuelta. Para ellos un empate sería fabuloso", agregó.
Tras el entreno del lunes, el defensa argentino del equipo brasileño Walter Kannemann, aseguró que será "un partido pegado, difícil, bien disputado" ante un rival que juega un fútbol al límite, en lo físico y en lo mental".
"Van a intentar en los primeros minutos salir a imponer su localía, sus bandas rápidas (...) Nuestros laterales van a tener un trabajo bastante difícil, pero los centrales tenemos también que ayudarlos un poco, vamos a intentar no darles espacio", agregó.
El partido se disputará este miércoles en el estadio Monumental de Guayaquil a las 18H45 (23H45 GMT) bajo la batuta del árbitro argentino Néstor Pitana y sus compatriotas Hernán Maidana y Juan Pablo Belatti por las líneas.