Ha iniciado el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, un nuevo período, que será el último, ya que en ese país es la norma de una sola reelección.
Ante miles de personas, al pie del Capitolio, juró de manera pública e hizo llamado a la unión para sortear los retos que enfrenta la primera potencia del planeta. Fue un acto de renovación del cargo como lo exige la tradición, ante el pueblo, un día después de haber recibido la investidura oficial, como manda la Constitución.
Tema principal de su breve intervención fue la economía, también la educación, el problema de la inmigración, el cambio climático. Enfatizó que: ‘ahora más que nunca debemos hacer estas cosas juntos, como una sola nación y un solo pueblo”.
Sobre prioridades en este segundo tiempo que empezó reiteró que ‘Estados Unidos seguirá siendo un faro de alianzas fuertes en todos los rincones del mundo’. Recalcó que una de sus mayores preocupaciones será la batalla contra el cambio climático. A sus compatriotas les dijo que deberían dar ‘una mejor bienvenida’ a los inmigrantes. Lo que indica que se insistirá en una reforma migratoria, muy importante dada la influencia y el poder creciente de los hispanos, un sector con muchos votantes.