El Banco Central de Brasil se apresta a elevar a 10% la tasa de interés de referencia, según estimaciones de analisas, en un contexto de elevada inflación y bajo crecimiento económico, a poco menos de un año de las elecciones presidenciales de 2014.
Consultados semanalmente por el Banco Central, los analistas y operadores en Brasil apuestan por un aumento de 0,5 puntos porcentuales en la tasa de interés, actualmente en 9,5%, en la reunión de dos días iniciada este martes y que será la última el año.
El proceso de aumento de la tasa, con cinco incrementos consecutivos, se inició en abril, cuando estaba en 7,25%.
La prioridad del Banco Central ha sido mantener bajo control la inflación, que en junio alcanzó 6,7% en doce meses, superando el máximo de tolerancia oficial, de 6,5%.
"La inflación se ha estabilizado, esa es una buena noticia, pero el nivel actual, de 5,8%, es todavía elevado" para la meta oficial de 4,5%, destacó a la AFP el economista jefe de Banco Fator, José Francisco Lima Gonçalves.
Para el analista, es "importante" que el Banco Central señale que está dispuesto a seguir controlando la inflación y por ello, estimó, decidirá esta semana un aumento de medio punto en la tasa, y volverá a aumentarla en las reuniones de enero y febrero, cuando podría llevarla a 10,50% o incluso 10,75% al año.
La presidenta Dilma Rousseff se había propuesto reducir la tasa de interés brasileña, que era de las más altas del mundo, y lo consiguió, pero el BC revirtió esa tendencia ante un fuerte aumento de la inflación.
La tasa de interés es un factor clave para el consumo y la inversión. Una tasa alta tiende a frenar ambos.
"En octubre del próximo año hay elecciones presidenciales y para la campaña presidencial lo que más pesa es una inflación controlada. Dilma Rousseff está preocupada con mantener la inflación, aunque también con otros indicadores, como el PIB y la producción industrial", estimó el analista de inversión de la consultora Spinelli Elad Revi.
El PIB brasileño creció un moderado 0,9% en 2012, y este año gobierno y mercado estiman que rondará 2,5%, con un PIB industrial que no debe pasar de 1,7% de expansión. El próximo año, los analistas también creen que el crecimiento económico del país será reducido, de 2,1%.
Las principales centrales sindicales protestaron el martes ante el Banco Central en Brasilia para que frene el aumento de la tasa de interés, que obstaculiza el crecimiento.
"La inflación se combate con medidas relacionadas al aumento de la producción y de los salarios", dijo el presidente de Força Sindical, Miguel Torres.
"Las centrales exigimos cambios urgentes en la política monetaria del gobierno, caracterizada por sucesivos aumentos de la tasa que sólo interesan a los bancos y favorecen el capital especulativo", denunció la Central Unica de los Trabajadores en un comunicado (CUT).
La decisión del Banco Central se hará pública después del cierre de los mercados el miércoles.