Estados Unidos afirmó el viernes que la política de Rusia de ayudar al régimen sirio se encuentra "moralmente en bancarrota", después de que un avión fuera interceptado por el gobierno de Turquía y obligado a aterrizar por transportar carga sospechosa.

La portavoz del Departamento de Estado norteamericana, Victoria Nuland, dijo que Washington había recibido del gobierno turco un listado "bastante completo" de lo que se encontró en el avión.

Sin embargo, Nuland no reveló a la prensa detalles sobre la carga, aunque dijo no tener "ninguna duda de que se trataba de material militar".

El canciller ruso, Sergei Lavrov, dijo, sin embargo, que el avión de Syrianair interceptado por Turquía en un vuelo de Moscú a Damasco transportaba equipos de radar, e insistió en que Rusia no había violado ninguna ley.

"Esta carga es un equipo eléctrico técnico para estaciones de radar, se trata de equipo de doble finalidad, pero no está prohibido por las convenciones internacionales", dijo Lavrov.

Nuland reconoció que Rusia no ha violado ningún embargo sobre el presidente sirio Bashar al Asad y su gobierno, pero dijo que "la política (de Rusia) sigue estando moralmente en bancarrota."

"Hemos estado diciendo desde hace casi un año, de que ningún país debe ser responsable de ayudar e instigar la máquina de guerra del régimen de Asad", agregó.

AFP