Al aducir que no parece prudente contemplar la posibilidad de que se adelante una nueva reforma tributaria, la presidenta de Asobancaria, María Mercedes Cuéllar argumentó que habría un perjuicio para los mercados.
La presidenta del gremio representativo del sector financiero colombiano integrado por bancos comerciales nacionales y extranjeros, públicos y privados, entre otros, indicó que “no suena sensato sostener que se precisa de otra reforma tributaria”, por lo que plantea que “si se trata de financiar el acuerdo de paz, el debate es otro, y no descarta la posibilidad de que parte del faltante de recursos se cubra con mayor endeudamiento”.
En opinión del gremio, “ni desde el punto de vista de los ingresos ni del gasto, parece razonable pensar que se requieren recursos adicionales”.
Y es que “los resultados de los ingresos dependerán de la diferencia entre las previsiones que se tuvieron cuando se realizaron los cálculos para la reforma tributaria en la segunda mitad de 2012 y lo que se obtendrá por cuenta de ella”.
Por ello, “el impacto total solo se conocerá este año cuando se presente la totalidad de las declaraciones de renta y se termine de reglamentar el CREE”, destacó Cuéllar.
En términos del gasto, la dirigente gremial se cuestionó: ¿acaso se está desbordando el gasto o como se le llama ahora, “la mermelada”?, al tiempo que expresó que de no ser así, no parece haber razones para justificar la que sería la quinta reforma tributaria en lo corrido de la administración Santos.
Cuéllar mencionó tres impuestos que se barajan como alternativas fiscales: continuar con el 4X1000, prolongar la vigencia del impuesto al patrimonio, y gravar los dividendos con el argumento de que ello es conveniente para mejorar la equidad.
Reacciones
Al ser consultados por EL NUEVO SIGLO, el senador y miembro de la Comisión Tercera, José Darío Salazar estuvo de acuerdo con las apreciaciones de Cuéllar.
“Me parece que la reforma no es viable porque los puntos cruciales se tocaron en la anterior. En aquella ocasión, aunque el Gobierno quiera taparlo, se subieron los impuestos, a pesar de la promesa del presidente Santos de no subirlos más. Especialmente en la clase media, lo advertimos y sin embargo el Gobierno la sacó adelante”, dijo.
Es entonces que sacar hoy una nueva “es un golpe muy duro al bolsillo de los colombianos, no creo que el Congreso esté dispuesto a votarla”.
En una orilla un poco más alejada se mostró el representante y quien fuera uno de los ponentes de la pasada reforma, Ángel Custodio Cabrera, quien indicó que “las reformas tributarias son viables en cualquier momento, efectivamente sí puede haber problema cuando se cambia la estabilidad jurídica de muchas actividades mercantiles en Colombia”.
Sin embargo, “aquí hay dos temas puntuales en los que todo el mundo tiene que mirar con cuidado, el impuesto del patrimonio y el del 4X1000. Estos dos tienen que financiar los agricultores y la posibilidad del posconflicto”.
Explicó que “sí es necesario por dos temas, la financiación del agro que está basada en el 50% del 4X1000, solamente por 2014, el 2015 cómo se va a financiar. Se podría decir que con el Presupuesto General de la Nación y si hay un buen crecimiento económico, pero si no tocar mirar.