Por tercer mes consecutivo la balanza comercial del país siguió cayendo debido al impulso que están tomando las importaciones y a la caída de las exportaciones.
En efecto, y teniendo en cuenta el reporte del Dane, aunque la balanza comercial acumulada sigue siendo positiva, vez es más baja ya que durante agosto presentó un déficit de 305.4 millones de dólares.
Debido a este resultado, en los primeros ocho meses del año el superávit se redujo a 2.639 millones de dólares. En este lapso, los principales déficits comerciales se mantienen con México (3.765 millones de dólares), China (3.486 millones de dólares) y Argentina (1.256 millones de dólares).
Por el contrario, los superávits comerciales más altos se presentaron (6.158 millones de dólares), España (1.710 millones de dólares) y Venezuela (1.348 millones).
De acuerdo al analista de Interbolsa, Julián Márquez, “la reducción del superávit comercial incrementa las presiones en el déficit de cuenta corriente, aunque la mayor entrada de inversión extranjera directa financia esté menor superávit. Por otro lado, un menor superávit en la balanza comercial le resta presiones apreciativas a la tasa de cambio”.
Sostiene el investigador que los resultados de comercio exterior para el octavo mes del año siguen mostrando signos positivos en las exportaciones no tradicionales y en las importaciones en general.
Sin embargo, la exportación de productos tradicionales se ha visto impactada por eventos puntuales, lo que le debe restar preocupación en el mediano plazo.
Debido a lo anterior, la preocupación de concentración en las exportaciones tradicionales se redujo nuevamente, aunque se mantiene en niveles altos. Por el lado de las importaciones, los resultados son positivos y permiten esperar una mejora del comercio al por menor y una mayor inversión fija en las cuentas nacionales (PIB).
Indica en su análisis Márquez, que “es importante recalcar el buen nivel de importaciones (por encima de los 5.000 millones de dólares mensuales) en el que se ha estabilizado en los últimos meses. Un menor superávit en la balanza comercial le resta presiones a la tasa de cambio, situación favorable para la discusión actual respecto a la revaluación del peso”.
En el informe del Dane para agosto, las importaciones crecieron 8.6 por ciento y las exportaciones cayeron 7.6 por ciento anual. Asimismo, las exportaciones tradicionales presentaron su tercera caída consecutiva debido a una contracción de la exportación de carbón y petróleo (eventos puntuales). Mientras tanto, las exportaciones no tradicionales crecieron 9.9 por ciento impulsadas por las agropecuarias no cafeteras (21 por ciento anual).
Durante agosto, las ventas al exterior sumaron 4.589 millones de dólares, es decir, 376 millones de dólares menos que lo registrado en agosto de 2011.
Los resultados del mes fueron afectados por dos eventos puntuales. Por un lado, en agosto la producción de petróleo cayó por el mantenimiento en el oleoducto de Ocensa (918,000 barriles, -3.7por cientoanual). Por otro, la huelga de los trabajadores de Fenoco (Ferrocarriles del Norte de Colombia) produjo la fuerte caída en las exportaciones de carbón (-55por cientoA/A).
Por otro lado, la importación de bienes de materias primas y productos intermedios presentó una mejor dinámica (12.7 por ciento) gracias a un aumento de 33 por ciento anual en combustibles. A su vez, las compras de bienes de consumo (12 por ciento) fueron impulsadas por la compra de bienes no duraderos (23.6 por ciento). La importación de bienes de capital y material de construcción mostró un bajo crecimiento (2.1 por ciento).
En general, la importación de dos de los tres principales grupos presentó buenos crecimientos, siendo la importación de bienes intermedios y materias primas (12.7 por ciento) el de mayor aumento, seguido por los bienes de consumo (12 por ciento).