El primer trimestre del año finalizó con un balance positivo para los cacaocultores, en particular por el tema de precios que es una de sus mayores preocupaciones.
En efecto, a lo largo del trimestre los precios pagados al productor estuvieron en promedio por encima de $5.000 kilo, nivel al cual estuvo antes de la coyuntura de los dos últimos años y que provocó el desánimo y las manifestaciones en contra del gobierno.
A ello se suma el apoyo de $500 por kilo para la comercialización del grano tal como lo anunció, días previos a la salida de la resolución correspondiente, el director de cadenas productivas del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, William Granados, durante un evento organizado por Fedecacao y como respuesta a la solicitud que el gremio había hecho desde el momento mismo en que se venció la ayuda del año anterior.
Este nuevo estímulo sirve para mejorar el ingreso de los productores y se da en un momento coyuntural ya que contrario a lo que pensaban algunos, los precios no bajaron sino que se mantuvieron estables alrededor de $5.000 y $5.100 por kilo, y es una señal clara por parte del gobierno de su interés de seguir apoyando al sector cacaotero, aunque como lo ha dicho el propio ministro la idea es que tales subsidios sean transversales para beneficiar al agro en su conjunto.
En todo caso, el llamado de la Federación a los cacaocultores del país es a que tengan en cuenta los requisitos que deben cumplir para acceder al incentivo del 2014 porque así hayan sido beneficiados el año pasado, ahora deben volver a inscribirse y presentar la documentación contemplada en la norma ante el Ministerio de Agricultura y no ante otras instancias locales o regionales.
Así mismo, el clima ha sido favorable para el cultivo del cacao, aunque el prolongado período seco que se vive actualmente puede resultar preocupante, pero lo sucedido en los primeros meses del año sirvió para un adecuado desarrollo de las siembras.
Adicionalmente, con el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural se firmó el contrato para el desarrollo de la campaña de productividad, con una inversión de alrededor de $3.000 millones para atender diversos municipios cacaoteros del país y que se encuentra en ejecución.
Otro factor que contribuyó al balance favorable del trimestre fue el comportamiento del dólar, ya que la revaluación contribuyó a que los precios internos y externos se acercaran más y aunque todavía no existe una relación directa entre el mercado doméstico y el mundial, sí es un referente para la industria.
La comercialización es otro factor destacado del primer trimestre ya que la Federación ha invertido más de mil millones de pesos en este periodo, tanto en el mercado interno como en el externo, dando un decidido apoyo a los productores nacionales por medio del precio pagado.
A esto ayudó también la participación que se tuvo en la Macrorrueda donde se lograron contactos importantes para negocios que están próximos a concretarse y que llevarían a un salto definitivo para ir posicionando el cacao colombiano en el mercado internacional.
Al respecto cabe señalar que en la medida en que aumentan las exportaciones, también se favorecen los cacaocultores ya que el grano que vende la Federación se lo compra directamente a sus afiliados a un precio por superior al del mercado.
Mercado internacional
En cuanto al mercado internacional también se destaca el buen momento de los precios, que en un momento determinado superaron los 3.000 dólares por tonelada, nivel que no veía desde hace más de dos años.
Así mismo, diversos analistas estiman que para los últimos meses se podría volver a llegar a esos niveles por cuanto se prevé que la oferta va a seguir siendo inferior a la demanda.
De hecho, la Organización Internacional del Cacao (ICCO) en sus primeras previsiones para el actual año cacaotero, que finaliza el 30 de septiembre, estima un déficit de 115.000 toneladas.
Para ello se basa en aspectos como las moliendas de Estados Unidos, Europa y Asia que han venido creciendo a un ritmo mayor al que lo hace la oferta, además porque los países africanos, mayores proveedores del grano, tienen cultivos envejecidos y de bajos rendimientos, pese a lo cual Costa de Marfil registró un aumento en su producción.
Un factor adicional que hace que las previsiones sean de déficit es el clima ya que se espera la presencia de un fenómeno de El Niño que aunque puede no ser tan intenso, sí afectará los cultivos.
Por todo esto, las perspectivas para el cacao colombiano son favorables, luego de un buen inicio de año, pero para ello es importante, como le reitera Fedecacao, que los productores trabajen en la calidad del grano porque sólo así se puede llegar a los mercados internacionales y conseguir un mejor precio.
Para ello se deben tener en cuenta las recomendaciones de los técnicos de la Federación en lo que respecta al beneficio y en general todo el manejo poscosecha.