El pasado domingo miles de feligreses se dieron cita en las iglesias bogotanas para celebrar el Domingo de Ramos. A diferencia de años anteriores, cuando el panorama era amarillo por los ramos elaborados con palmas de cera y vino, en este reinó el verde de las palmas robelinas y las plantas vivas que los feligreses llevaron a bendecir.

En la iglesia del 20 de Julio, uno de los sitios más visitados por los capitalinos en Semana Santa, predominó la mancha verde. Allí, la Secretaría de Ambiente entregó 26.500 palmas robelinas y 600 ramos elaborados con cáscara de mazorca, e hizo trueque con los feligreses que llevaban los ramos amarillos de palma de vino.

Las incautaciones de este año demuestran que los capitalinos se preocupan cada vez más por los recursos naturales. En los operativos de control en sitios como el 20 de julio, Bosa y Usaquén las autoridades decomisaron 32 bultos de palma de vino, cifra que en el Domingo de Ramos de 2012 fue de 80 bultos y en el 2011 fue de 333.

“Llevamos 12 años sensibilizando a los ciudadanos sobre el daño que le ocasionamos a nuestros recursos naturales utilizando estos ramos, o consumiendo carne de animales silvestres. La disminución en los decomisos demuestra que con la campaña ‘Porque la vida es sagrada, reconcíliate con la naturaleza’, le estamos llegando a muchas más personas”, apuntó Carmen Rocío González, subdirectora de Silvicultura, Flora y Fauna de la Secretaría de Ambiente.

Sin embargo, no todo es positivo, ya que la fauna silvestre sigue siendo víctima de las celebraciones religiosas. En lo corrido de este mes las autoridades han decomisado 38,8 kilos de carne de tortuga icotea, la cual es comercializada por esta época en todo el país.

Según la Policía Ambiental y Ecológica, cinco personas fueron capturadas por traficar con animales silvestres en los últimos días.

“En época de cuaresma la icotea es comercializada debido a que su carne blanca es muy parecida a la del pollo. Los cazadores primero las ponen vivas en agua caliente, y luego con una segueta las abren y les extraen la poca carne que tienen. Una icotea adulta que pesa aproximadamente 1.500 gramos sólo tiene 20 por ciento de carne en su cuerpo. La icotea fue declarada por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza como una especie amenazada”, puntualizó González.

El contrapeso lo hizo la entrega de 26.500 palmas robelinas y 600 ramos elaborados con cáscara de mazorca a los feligreses que visitaron la iglesia del 20 de Julio en este Domingo de Ramos, además hizo trueque con los asistentes que llevaban los ramos amarillos de palma de vino.

A pesar de las buenas cifras en materia de palma de vino, las autoridades continúan alerta por el número de carne de fauna silvestre que ha sido incautada.

En lo corrido de este mes se han  decomisado 38,8 kilos de carne de tortuga icotea, la cual es comercializada por esta época en todo el país.

La Policía Ambiental y Ecológica informó que 5 personas fueron capturadas por traficar con animales silvestres en los últimos días.