El banco Central revisó a la baja ayer su previsión de crecimiento de Brasil para 2012, de 2,5% a 1,6%, en sintonía con el débil desempeño de la actividad mundial por causa de la crisis, pero pronosticó una recuperación para el próximo año.
"El crecimiento del PIB para 2012 está proyectado en 1,6%, estimación 0,9 puntos porcentuales menor a la divulgada en el último informe" trimestral, indicó el Banco Central.
La previsión está por debajo de la del gobierno, que redujo recientemente de 3% a 2% su pronóstico para este año, y un poco por encima de la del mercado, que proyecta un alza del PIB de 1,57% en 2012.
La sexta economía del mundo, que creció 2,7% en 2011 y 7,5% en 2010, acumuló 0,6% de expansión en el primer semestre.
En su informe trimestral, el Banco Central previó un menor desempeño de la economía y una inflación de 5,2% en 2012, encima del centro de la meta del 4,5% fijada por el gobierno pero dentro del límite de tolerancia de 6,5%.
El Banco Central hizo sus pronósticos teniendo en cuenta que la economía global ofrece una "perspectiva de bajo crecimiento por un período de tiempo prolongado".
"Las expectativas de crecimiento de economías emergentes continúan apuntando hacia un ritmo de actividad moderado en países de América Latina y de Asia, en reflejo del bajo crecimiento" de las economías desarrolladas, indicó.
En el caso de Brasil, agregó, se espera una recuperación a partir del segundo semestre que deberá jalonar el crecimiento en 2013.
"El ritmo de actividad tiende a intensificarse en este semestre y en el próximo año, con alguna asimetría entre los diversos sectores", señaló en su informe.
En ese sentido, el crecimiento podría recuperarse en un 3,3% entre mediados y finales del próximo año, agregó la entidad.
El gobierno, por su lado, espera un crecimiento económico de más de 4% para 2013.