Decenas de camiones cargados de comida y medicamentos llegaron el miércoles a varias ciudades asediadas de Siria, donde cientos de miles de personas sobreviven en condiciones dramáticas.
En Siria, casi medio millón de personas viven en zonas asediadas, y 4,6 millones en áreas de difícil acceso, según la Oficina de Naciones Unidas para la Ayuda Humanitaria (OCHA).
"El convoy comenzó a entrar en Muadamiyat al Sham. Está compuesto por 35 camiones que transportan 8.800 sacos de harina, 4.400 raciones de comida, además de alimentos energéticos, medicamentos y equipos obstétricos", dijo a la AFP Muhanad al Asadi, delegado de la Media Luna Roja.
El coordinador humanitario de la ONU en Siria, Yacub el Hillo, dijo que unas 93.000 personas recibirán ayuda.
"Hoy, llegó a Muadamiyat al Sham ayuda para 30.000 personas. También enviaremos ayuda suficiente para un mes para 42.000 personas en Madaya y para 1.000 personas en Zabadani", en la frontera con Líbano, detalló.
"Paralelamente, se entregará ayuda a 20.000 personas en Fua y Kafraya", localidades chiitas en el noroeste de Siria, asediadas por los rebeldes.
La AFP constató la llegada de tres camiones a Madaya. Un primer camión entró también a Fua y Kafraya. "Les seguirán decenas de camiones" para estas tres ciudades, dijo a la AFP Hillo.
- "Insoportable" -
Por otra parte, la Media Luna Roja informó de la llegada a Madaya -- donde varios habitantes murieron de hambre -- de una clínica móvil.
Se espera también la llegada de ayuda a otras zonas asediadas, como en Deir Ezzor (noreste) -- una ciudad en manos del régimen pero sitiada por los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI). Hasta ahora, se lanzaba medicamentos o alimentos desde aviones sirios o rusos.
Siria, en guerra desde hace casi cinco años, afronta una crisis humanitaria de una gravedad extrema, con más de la mitad de sus 23 millones de habitantes desplazados.
La canciller alemana Angela Merkel declaró el miércoles que la situación humanitaria en Siria es "insoportable" y volvió a proponer la creación de una zona de exclusión aérea para proteger a los civiles.
El sur de Siria, fronterizo con Jordania, tampoco se ha librado de los combates. Según la ONU, más de 70.000 personas han tenido que abandonar sus hogares en esta región del país tras la intensificación hace tres meses de los ataques aéreos.
- Atentado en Turquía -
El emisario de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, fue blanco de críticas del régimen sirio tras afirmar que el gobierno tiene el "deber" de permitir a la ONU entregar ayuda a los civiles.
El gobierno "no permitirá que nadie (...) diga que va a poner a prueba la seriedad de Siria", declaró un responsable del ministerio de Relaciones Exteriores. "La entrega de ayuda humanitaria a las zonas sitiadas es un compromiso continuo del gobierno", señaló.
Por otra parte, el presidente turco Recep Tayyip Erdogan afirmó que su país no aceptará nunca la creación de un bastión kurdo al sur de su frontera con Siria y que no tiene "ninguna intención de cesar" los bombardeos contra las posiciones de las milicias kurdas sirias.
Al menos 500 rebeldes sirios cruzaron el miércoles la frontera turca para ir a la ciudad siria de Azaz, en la provincia de Alepo, "bajo la supervisión de las autoridades turcas", dijo a la AFP Rami Abdel Rahman, director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
"Quieren brindar apoyo a los insurgentes frente a la progresión de las fuerzas kurdas en el norte de la provincia" de Alepo, añadió.
Esta ONG afirmó además que el ejército israelí llevó a cabo el miércoles por la noche tres ataques aéreos contra una posición del ejército sirio al sur de la capital, Damasco.
Esta información fue sin embargo desmentida por una fuente de seguridad en el terreno.
Pese a un acuerdo de cese el fuego previsto para finales de semana, los ataques aéreos del régimen sirio y de la aviación rusa no han disminuido, y posiblemente se han intensificado, aseguró el miércoles un portavoz militar estadounidense.
Turquía, un actor clave en la guerra en Siria, fue blanco de un ataque con coche bomba contra un convoy militar el miércoles, que dejó 28 muertos y 31 heridos en pleno centro de Ankara. El atentado no ha sido reivindicado.
/AFP