Con paso firme avanza en el Congreso de la República el proyecto de ley que busca que las personas que tengan promedios inferiores a tres salarios estén exentas del pago por retiros en cajeros automáticos.

De aprobarse esta iniciativa de autoría  del representante del Centro Democrático Samuel Hoyos, "se estaría aliviando la carga y los costos financieros para millones de colombianos".

Según el parlamentario este proyecto también busca fomentar la bancarización que  es fundamental para el sector y para el país.

 El parlamentario indicó que pese a que Asobancaria ha manifestado no estar de acuerdo con este proyecto, la idea es lograr sacarlo adelante “pues es justo que a los colombianos más pobres se les alivie y se les exima del pago por retiros; sobre todo teniendo en cuenta que los bancos reportaron en el 2015 alrededor de 10 billones de pesos en utilidades”.

 Se espera que la iniciativa  entre a su segundo debate la próxima semana en la plenaria de la Cámara de Representantes.

Hace unos meses el presidente de Asobancaria, Santiago Castro, dijo a EL NUEVO SIGLO que las  redes de cajeros automáticos existentes en el país tenderían a desaparecer si se llega a convertir en ley esta iniciativa.

El dirigente del gremio explicó que al no poderse realizar un cobro por la utilización de los cajeros,  que es la cuota que pagan los usuarios al hacer sus retiros estos tenderían a desaparecer porque no habría con qué mantener las redes.

“Simplemente dejan de invertir y no va a haber un solo cajero en Colombia porque a la larga no se le va a reconocer el costo que esto implica. Entonces aquí estamos afectando la libertad económica, la libre competencia y al final le estaríamos generando un grave daño al usuario que se está viendo beneficiado de la disposición de miles de cajeros en el país y   con esta ley vería una reducción sustancial de estos cajeros o el incremento de las tasas para recuperar estos costos por otros mecanismos”, dijo Castro.

El representante de las entidades financieras señaló que aunque existe una buena intención por parte del autor de este proyecto de ley para favorecer al consumidor, esta iniciativa sería un arma de doble filo porque por el otro lado, también se verían afectados los usuarios  ante  una eventual desaparición de redes de cajeros.

“Este proyecto no aporta en nada a la bancarización, es más, la afecta muchísimo porque la bancarización está en base a que los costos se reconozcan como tal y que puedan ser recuperados. Si un costo que es el de poner un número de cajeros que tiene Colombia que es muy grande, no se puede recuperar, pues entonces su caso de negocios deja de existir. Entonces volveríamos otra vez a los tiempos antiguos donde uno tenía que desplazarse físicamente a donde estuviera la oficina bancaría y hacer una larga cola para poder hacer una transacción”, puntualizó Castro.