Con éxito avanza la construcción, pavimentación, estudios y diseño de la Marginal de la Selva en Colombia, identificada como la Ruta Nacional 65 que se ha convertido en uno de los proyectos más significativos de competitividad del Gobierno Nacional, pues además de facilitar el comercio entre los países andinos, pretende interconectar el sur y el norte del país y a las comunidades aisladas.

El Ministerio de Transporte, a través del Instituto Nacional de Vías (Invías), acaba de asignar al Consorcio Metrovías-Selva un total de 193.000 millones de pesos para la pavimentación de 87 kilómetros de tramo entre San José del Fragua y San Vicente del Caguán (Caquetá), y para realizar los estudios y diseños de de la vía que conectará a San Vicente del Caguán con San José del Guaviare (Guaviare).

La pavimentación y mejoramiento del primer tramo, que incluye puentes y pontones, hace parte de una red vial que une al departamento de Caquetá con Meta, Huila y Putumayo. Actualmente la etapa norte de este gran proyecto, que comprende los municipios de San José del Guaviare – Puerto Concordia, Puerto Lleras, Granada, Villavicencio, Yopal y Tame está totalmente construida y empata con la red vial venezolana.

Los estudios corresponden a una ruta que aún no ha sido trazada y que unirá al sur de Colombia con los llanos orientales, al tiempo que facilitará el comercio entre Colombia, Venezuela y Ecuador.

Según Carlos Ávila, gerente regional (Macarena – Caguán) de la Unidad Administrativa Especial para la Consolidación Territorial (UACT), se pretende mejorar la situación de aislamiento que enfrentan cientos de familias de La Macarena, quienes no tienen forma de conectarse con la capital del Meta – Villavicencio, a través de una carretera pavimentada.

“Los productores o los campesinos de esta región utilizan trochas para sacar su oferta al mercado. Sin embargo, la dificultad del terreno genera más pérdidas que ganancias a sus finanzas”, concluyó.