Que cada departamento tenga una curul en el Senado es lo que se propone el acto legislativo que pasa a cuarto debate en la plenaria del Senado.

La idea es que esta iniciativa esté aprobada de aquí al 16 de junio de 2016 cuando se culmina el periodo legislativo.

Esta curul se asignará a la lista que haya obtenido la más alta votación en las elecciones para Cámara en cada una de esas circunscripciones y se adjudicará al candidato que haya obtenido el mayor número de votos preferentes, o sea, el primero en el orden de inscripción en lista cerrada. La elección así provista no dará lugar a su reemplazo en la Cámara.

Lo que se contempla es que la ley reajuste la distribución de las de la Cámara y realizará los ajustes presupuestales necesarios entre el Senado y la Cámara. De aprobarse este acto legislativo solo se aplicaría a partir de las próximas elecciones.

En el informe de ponencia se recuerda que el senador Roberto Gerlein, del Partido Conservador, hizo un pormenorizado recuento de la evolución histórica que ha tenido la conformación del Senado, para concluir que este proyecto cabe dentro de la tradición constitucional colombiana en cuanto al número de integrantes de la cámara alta.

De la misma manera los senadores Eduardo Enríquez (Partido Conservador), Horacio Serpa (Partido Liberal) y Alexander López (Polo Democrático) destacaron la conveniencia de garantizar desde el texto constitucional que todos los departamentos del país puedan tener representación en las dos cámaras.

Entre los argumentos expuestos se dice que a pesar de la pretensión del constituyente de 1991 de contar con un Congreso bicameral de un Senado de circunscripción nacional y una Cámara de circunscripción territorial departamentalizada, en la práctica se ha presentado un problema de legitimidad de la representatividad plasmada en el texto constitucional, porque el peso demográfico tiene una relación directamente proporcional con la cantidad de congresistas que cada región del país logra elegir.

Se expresa que el  hecho de que los senadores realicen sus campañas en las regiones denota que a pesar de la circunscripción nacional, la mayoría de los senadores tiene una representatividad fuertemente arraigada a un ámbito geográfico específico del territorio.

Dentro de la argumentación del informe de ponencia se recuerda de manera concreta un estudio de la MOE, las regiones Caribe (Guajira, Magdalena, Cesar, Bolívar, Atlántico, Sucre y Córdoba) y Andina Oriental (Norte de Santander, Santander, Boyacá, Cundinamarca –no incluye a Bogotá-, Tolima y Huila), eligieron en el año 2014 a 50 de los 100 senadores por circunscripción nacional, mientras que las regiones del Piedemonte (Arauca, Casanare, Meta, Caquetá y Putumayo), Suroriental (Vichada, Guainía, Guaviare, Vaupés y Amazonas) y San Andrés, en las mismas elecciones eligieron 3 senadores.