Las autopartes consideran que el mercado será sano pero piden que el Gobierno blinde al sector.
Con buena expectativa recibieron algunos empresarios de las autopartes el inicio de discusiones del Tratado de Libre Comercio entre Colombia y Japón, que se calcula será firmado en un año.
Para el presidente de la Asociación Nacional de Comercio Exterior (Analdex), Javier Díaz, el Gobierno Nacional ya tiene claro cuáles son las sensibilidades que tienen los productos del sector.
“Japón es un productor mundial importantísimo, es de los jugadores más importantes de automóviles y autopartes, por eso creemos que no tendremos problemas inmediatos”.
Definiéndolo como un mercado formal y muy bien organizado, los productos japoneses se caracterizan, dice, por ser de excelente calidad y “tenemos que negociar, como se hizo con Estados Unidos, pues este tratado está muy lejos de ser como el de China. Eso es una ventaja”.
Aseguró que el gremio de las autopartes podría estar tranquilo al negociar con excelentes estándares de calidad. “Tenemos inversión japonesa en cuanto autopartes y por eso estamos seguros de que va a ser similar al acuerdo con Estados Unidos”.
Preocupaciones
Sin embargo, reconoce que hay preocupaciones fuertes de que se haga alguna negociación “sin tener en cuenta las asimetrías ni los tiempos y afortunadamente el Gobierno ya tiene muy claro cómo es el Tratado en la cadena del sector automotriz”.
Algunas de las características para el acuerdo que el Gobierno debería tener en cuenta es el tema del largo plazo en las negociaciones puesto que “la desgravación de vehículos sea a la canasta, que sea la más larga, pues que si van a negociar a 15 ó 20 años, que queden en ese tiempo”.
Explicó que hay una buena penetración de vehículos japoneses como Mazda, y en autopartes están Suzuki.
Consideró que es difícil que Colombia exporte “porque hay que mirar si para autopartes hay nichos pero veo poca la posibilidad, por eso tenemos que defendernos ya que el mercado se vuelve más ofensivo”.
Opinión que es compartida por el presidente de la Asociación Colombiana de Fabricantes de Autopartes, Tulio Zuluaga, al comentar que éste será un TLC “aceptable”, refiriéndose a que tendrá equilibrio.
“Sabemos que tanto los vehículos y las autopartes japonesas son costosas por lo que va a haber una sana competencia. No hay preocupación porque los precios son altos”, dijo.
Recordó que en el pasado se importaba desde Japón en mayor cantidad ya que pasó de ser “un producto de muy mala calidad, a ser el top de los repuestos de autopartes y vehículos de excelente calidad”.
Actualmente se importan algunos tipos de vehículos pero marcas como Toyota ya se fabrican en el país, en cambio Nissan vienen desde México y Brasil. Desde Japón vienen las marcas Subaru y algunos Nissan.
Colombia importa aproximadamente 350 millones de dólares en autopartes, “es como el 9% pues en el pasado era del 20%. Exportamos cerca de 65 millones de dólares”.
En un futuro, asegura, las exportaciones podrían ser durante los primeros tres años de 100 millones de dólares anuales y las importaciones podrían llegar a 500 millones de dólares”.
La diferencia de los precios en los productos del sector es del 20% a favor de Colombia pues “un juego de amortiguadores puede valer 250 mil pesos mientras que en Japón vale 20% más”, añadió.
Ayer el propio ministro de Comercio, Sergio Díaz-Granados comentó que se inició la ronda de negociaciones y “la prioridad de Colombia es buscar que se mejore la exportación de productos como carne, pollo, lácteos y bases de proteína que son de alto consumo en Japón”.
Dijo ayer en medios que Colombia ve “gran potencial en las flores. Esto también es de gran demanda. La estrategia del Gobierno es avanzar primero en un tratado de rebaja de aranceles y después en el mejoramiento sanitario, para ayudar así a entrar más fácilmente los productos de consumo colombiano”.
El gremio de las autopartes no se muestra preocupado por el TLC con Japón.