La tasa de cambio alcanzó el primer objetivo de los analistas para el 2012, fijado en 1.800 pesos, con lo que finalmente éste se cumplió más rápido de lo previsto a pesar de que se esperaba para algún punto del primer semestre. De hecho, el dólar alcanzó el jueves pasado un mínimo de 1.795.5 pesos, con lo que la moneda local acumula una revaluación de 7.3% en lo que va del año.

Sin duda, el anuncio de la FED esta semana, en cuanto a que la tasa de interés de la principal economía del mundo puede permanecer cerca de los niveles actuales hasta finales de 2014, contrario a lo previsto anteriormente (mitad de 2013), favoreció el comportamiento de las monedas de países con sólidos fundamentales y tasas de interés relativamente altas como el caso colombiano.
De acuerdo con lo anterior y a la espera de eventos relevantes, resulta ahora cada vez más probable que el peso colombiano mantenga un patrón similar al observado durante la primera parte del 2011, lo que implica que el siguiente nivel más probable de ser observado en las próximas semanas se encuentra cerca de 1.760 pesos.
En general, un nivel de tasa de cambio cercano o levemente inferior a 1.760 pesos resulta consistente con lo previsto por los especialistas, según los cuales “se esperaría un rango de negociación del dólar para 2012 entre 1.750 pesos y 1.950 pesos, con desviaciones de estos niveles considerados como una oportunidad de compra o venta, respectivamente, de cara al mediano y largo plazos. La volatilidad en todo caso, debe persistir”.
Desde el punto de vista fundamental, entonces la tendencia bajista debería continuar en el mediano plazo. De hecho, se destaca que durante las dos primeras semanas de enero los flujos de inversión extranjera directa alcanzan 654 millones de dólares, mientras que los dirigidos a portafolio 49.4 millones de dólares.
Si bien estos valores se encuentran levemente por debajo de los observados durante el mismo período de 2011 (714 millones de dólares y 78 millones de dólares, respectivamente), siguen siendo altos, más aun considerando que el año pasado los flujos de inversión registraron máximos históricos.
De otra parte, resulta probable que en la medida en que la tasa de cambio supere la barrera de 1.800 pesos, la tendencia puede tender a moderarse considerando en particular los renovados temores por parte de algunos participantes del mercado en cuanto a medidas de intervención por parte de las autoridades.