El proclamado autor de siete asesinatos en Francia, Mohamed Merah, dijo que quería "morir con las armas en la mano" tras pasar una segunda noche atrincherado en su apartamento de Toulouse (sudoeste), indicó el ministro del Interior, quien ignora si el militante de Al Qaida sigue vivo.
Merah, un francés de origen argelino, de 23 años, había dado parte el miércoles de su intención de entregarse, pero desde entonces "entró en una lógica de ruptura", dijo el ministro, Claude Guéant.
Guéant expresó su extrañeza por la falta de reacción de Merah a las potentes detonaciones que la policía efectuó durante la noche a proximidad del domicilio del islamista en el barrio de la Côté Pavée de Toulouse, en el marco de una estrategia de desgaste psicológico para obligarlo a rendirse.
"Tenemos una prioridad, que (Merah) pueda rendirse para entregarlo a la justicia, y por lo tanto capturarlo vivo: esperamos que siga vivo", pero resulta "bastante extraño que no haya reaccionado" a las cargas explosivas, dijo Guéant a la radio RTL.
Las autoridades cercaron el domicilio de Merah a las 03H20 (02H20 GMT) de la madrugada del miércoles, con la intención de capturarlo para interrogarlo por los asesinatos, en un lapso de ocho días, de tres militares y de cuatro miembros de la comunidad judía, entre ellos tres niños, en Toulouse y en la vecina ciudad de Montauban.
Esos crímenes sembraron pavor y sacudieron el panorama político de Francia, que dentro de un mes exacto -el 22 de abril- celebrará la primera vuelta de la elección presidencial en la que el actual mandatario, Nicolas Sarkozy, espera obtener un segundo mandato.
Aparte de proceder a atronadoras detonaciones, las autoridades cortaron durante la noche el alumbrado público del barrio.
Según una fuente cercana al caso, un intento de mediación con Merah, con la ayuda de uno de sus allegados, fracasó el jueves al anochecer.
Según los reportes de Guéant sobre los diferentes contactos con Merah, éste reconoció ser el autor de los siete asesinatos y afirmó que había actuado solo, tras haber aceptado una "misión" de Al Qaida para cometer un atentado en Francia.
El fiscal a cargo de la investigación, François Molins, indicó que la unidad de élite de la policía hizo el miércoles "varias tentativas para entrar" en el piso de Toulouse, pero que cada vez fue recibida a tiros.
En la primera madrugada, Merah había herido a dos policías.
El islamista no "expresa ningún pesar" salvo el de "no haber causado más víctimas" y se jacta de "haber puesto a Francia de rodillas", agregó, precisando que Merah planeaba asesinar el miércoles "a dos policías" de Toulouse y a un militar.
En Montauban, donde asistió a una ceremonia de homenaje a los militares asesinados, Sarkozy declaró que los uniformados fueron víctimas de una "ejecución terrorista".
"Ese hombre quería poner a la República de rodillas, pero la República no cedió, no retrocedió, no falló" y los "crímenes no quedarán impunes", agregó.
Guéant dijo el miércoles que la investigación apuntará también a "las conexiones que Merah podría tener con otras personas".
Se trata de alguien "vinculado a gente que se reivindica como cercana al salafismo y a la yihad" (la guerra santa islamista), dijo el ministro.
Indicó asimismo que Merah había participado en la "yihad" en la región fronteriza entre Pakistán y Afganistán.
"Dice ser un 'muyahidín' (combatiente de Dios), pertenecer a Al Qaida y haber querido vengar a los niños palestinos y castigar a las fuerzas armadas de Francia por sus intervenciones en el extranjero", agregó.
El fiscal Molins informó de que Merah fue condenado unas 15 veces por diversos delitos siendo menor y ya entonces tenía "un perfil violento" y "problemas de comportamiento".
Paralelamente, fuentes cercanas a la investigación dijeron que el sospechoso fue detenido en Afganistán a fines de 2010 por delitos comunes.
El fiscal Molins confirmó dos estadías en Afganistán y Pakistán de Merah, que presenta "un perfil de autorradicalización salafista atípico".
"Fue a Afganistán sin pasar por los canales conocidos, por sus propios medios", indicó.
Merah "habló de su estadía en Afganistán, explicando que no tiene alma de suicida ni de mártir, y que prefiere matar y seguir vivo", contó el fiscal, aunque tras dos noches de asedio el joven pudo haber cambiado de parecer.
Fuentes judiciales anunciaron que la madre del sospechoso, su hermano y la compañera de éste fueron detenidos, en el marco de la investigación.
La policía dio con el sospechoso gracias al rastreo en internet de la dirección IP de su hermano. El análisis de los vídeos de las cámaras de vigilancia y el perfil psicológico de Merah fueron también decisivos para su identificación, según el fiscal.
AFP